El grito de Lorca

Estuve viendo ayer ‘Suites. El viaje de la percepción’, la tercera exposición que acoge el Centro Lorca desde la llegada del legado del poeta. Otra maravilla, como las dos anteriores.

Estamos ante una exposición poco vistosa, en el sentido espectacular del término. Una exposición que invita al descubrimiento sosegado, que estimula la curiosidad y que abre puertas inéditas, al menos para mí, al universo creativo de Lorca.

Lo que más me fascina de estas muestras es disfrutar de los originales de los manuscritos del poeta, con sus tachaduras, palabras cambiadas y nuevos versos incrustados de forma abigarrada en el papel. Acostumbrados a leer las versiones definitivas de los poemas, resulta muy emocionante asomarse al proceso creativo del escritor, a sus dudas, cuitas y zozobras.

Busquen en su biblioteca —o en Google Books— el poema ‘Armonía’, de la llamada Suite Newton. En un momento, reza así: “Las olas / vienen con el suspiro / y la estrella / con el grillo”.

Si se pasan por la exposición del Centro Lorca, acérquense a la vitrina que contiene el manuscrito de ese poema y verán que, originalmente, el autor no escribió ‘suspiro’, sino ‘grito’. ¡Cómo varía el sentido del poema, cambiando ese grito por un suspiro!

Lo más curioso de ‘Suites. El viaje de la percepción’ es que se trata de una exposición sobre un libro que jamás existió. Al menos, en vida del poeta. La muestra también desgrana los infructuosos esfuerzos de Lorca por publicar una colección de poemas cuyos originales están actualmente dispersos por medio mundo. De hecho, ‘Suites’ como libro sigue siendo un ‘work in progress’, un trabajo en ejecución en el que se haya inmersa Melissa Dinverno, la comisaria de esta exposición.

Igualmente destacable es el trabajo de producción de la muestra, con las paredes de las salas expositivas llenas de reproducciones de poemas, breves ‘suites’ que estimulan nuestros sentidos, y de cartelas explicativas del titánico trabajo lorquiano por provocar la emoción del lector de forma pura y directa, trascendiendo el sentido interpretativo de las palabras y del lenguaje. Por ejemplo, esa composiciones cortas, flashes luminosos a modo de haikus.

Jesús Lens