Exiliarse a Puerto Rico

Tras la Guerra Civil llegó un doloroso exilio para cientos de miles de españoles que ya no tenían cabida en la España franquista, fascista y nazificada. Está muy documentado el exilio a México, Francia e incluso Nueva York, pero no tenía ni idea de que Puerto Rico acogió, entre otros, a Juan Ramón Jiménez, Zenobia Campubrí, nuestro Francisco Ayala o María Zambrano.

Francisco Ayala en Puerto Rico

De esto me enteré la pasada Navidad, tomando una de nuestras Alhambras Gourmet con Ernesto Estrella, que estaba inmerso en la preparación de una exposición para la Biblioteca Nacional que ya se puede disfrutar en Madrid hasta el próximo 3 de septiembre. Aprovechando nuestra escapada a la capital del reino para el concierto de Harry Styles, nos acercamos a verla. ¡Y lo que aprendimos!

Enhorabuena, Ernesto, y muchas gracias por descubrirnos una más de las muchas páginas (semi)ocultas de nuestra historia. Y también una isla a la que tengo muchas ganas de ir para conocerla en profundidad, visto lo visto y oído lo oído en el documental que se proyecta en la exposición.

El exilio empobrece al país que expulsa a sus ciudadanos en la misma proporción que enriquece a los de acogida. Gracias a la presencia de notables intelectuales españoles en su Universidad y a la interacción con las luminarias culturales del país en las aulas, pero también en cafés, restaurantes, plazas y calles; Puerto Rico disfrutó de una explosión cultural y creativa de primer orden. Sus autoridades académicas y políticas aprovecharon la oportunidad que la presencia de los exiliados españoles les brindaba y les abrieron las puertas de los centros educativos, dándoles hasta las llaves de la ciudad.

Libros, cartas manuscritas, textos variopintos, fotografías, el facsímil del Nobel a Juan Ramón… decenas de objetos, la mayoría en papel, que para eso estamos en la Biblioteca Nacional, conforman una clarividente exposición que nos hace reflexionar sobre el dolor del exilio y la generosidad en la acogida. Para tomar nota.

Más adelante les hablo de otra joya de exposición: ‘Ocultos’, en el Thyssen. Y de sus ‘Encuentros’ en forma de diálogo entre obras y artistas clásicos y contemporáneos. Y mañana, en El rincón oscuro, ‘Top Secret’, una joya sobre cine y espionaje, en CaixaForum, que tampoco se deben perder.

Mañana, más.

Jesús Lens