De tabernas, bares y bodegas

No era habitual de Bodegas Espadafor. Nunca me ha pillado cerca de mi entorno vital o laboral y, aunque más de una vez he echado unas cañas sobre su barra, no forma parte de mi educación cervecero-sentimental. Pero me duele su cierre. Me apena. Me pone triste. Me cabrea. Y me preocupa.

Después de más de 100 años abierta, Bodegas Espadafor no cierra porque el negocio fuera mal, porque la clientela le hubiera dado la espalda o porque la caja fuera insuficiente. No era un garito en decadencia que viviera de las glorias de tiempos pasados o del recuerdo de las copas que, entre sus cuatro paredes, se echaron al coleto Miguel Ríos o Enrique Morente.

Bodegas Espadafor cierra porque está situada en un edificio de la Gran Vía vendido a una cadena hotelera que lo remodelará por completo. Y, aunque los dueños de la Bodega trataron de comprar el local en el que lleva más de un siglo, fue imposible. La gentrificación, o sea.

Bodegas Espadafor era uno de esos locales que le dan sabor al centro de una ciudad. Que la hacen especial y diferente. Que le confieren personalidad e identidad propia. Un garito que servía para acercar a la gente de aquí con esos turistas y viajeros que buscan bares auténticos donde echar una caña en Granada, que para eso -también- han venido a nuestra ciudad.

El adiós de Bodegas Espadafor supone la despedida y cierre de un puñado metros cuadrados de esa Granada histórica que tanto atrae al turismo. Porque las ciudades, más allá del patrimonio histórico-artístico, son sus barrios, sus tiendas, sus vecinos. Y sus bares, por supuesto.

Cuando preparo mis viajes, uno de los aspectos a los que presto más atención es a los bares. A los Pubs, en Irlanda o Gran Bretaña. A las Cervecerías, en Alemania. A los Diner, en Estados Unidos. Tanto, que colecciono libros con fotografías de garitos de todo el mundo.

Más irlandés que una cruz celta

¿Sabría alguien del Ayuntamiento decirnos, tras el cierre de Bodegas Espadafor, cuáles son los bares, cafés, tabernas y bodegas más antiguos y con más solera de Granada? ¿Están clasificados y/o catalogados? ¿Cuál sería el equivalente granadino a El Rinconcillo de Sevilla, abierto desde 1670, o a la Casa de Guardia malagueña, más allá de La Sabanilla, cerrada en 2010 por un expediente de ruina?

Jesús Lens