El Ministerio del Tiempo 5 y 6

Estábamos frente a la puerta de Bib-Rambla, en mitad del bosque de la Alhambra, y Blanca Espigares se explayaba sobre el papel esencial que Leopoldo Torres Balbás desempeñó en la protección y conservación del monumento nazarí. No lo pude evitar: mirando a Javier Olivares, creador de la maravillosa serie ‘El Ministerio del Tiempo’ junto a su hermano Pablo y actual director creativo de la misma, solté un espontáneo e impremeditado “aquí hay tema, Javier”.

Gravite viaja en el tiempo por la puerta Bib Rambla

Discreto como es, enarcó un ceja y sonrió. Me arrepentí sobre la marcha de haber pronunciado aquella frase, poniéndome en el pellejo de uno de los grandes creadores españoles contemporáneos. ¡La de veces que le habrán dicho lo mismo a Javier! Todo el mundo conoce a un personaje o un hecho histórico de su terruño que, a su parecer, sería merecedor de una misión de los agentes del Ministerio.

Vaya en mi descargo que, después de ver el documental de José Sánchez-Montes sobre Torres Balbás, ‘La Alhambra en peligro’, me he convertido en leopoldista, torreño y balbasiano; todo en uno.     Y ’El Ministerio del Tiempo’ es la gran serie de televisión española del siglo XXI. De hecho, el festival Gravite, patrocinado por CaixaBank y CajaGranada Fundación, está creado a su imagen y semejanza. A partir de ahí, aten cabos.

Así lo dije durante la entrega del premio Viajero en el Tiempo a Olivares y al actor Ángel Ruiz, que dio vida a Lorca mucho más allá de lo puramente metafórico en una serie que aúna todo lo que reivindica nuestro festival: la serie es la fusión de ciencias y letras, la combinación del rigor científico y la calidad a ultranza con la amenidad y la diversión, la crítica a la superchería y la superstición y la defensa de la ciencia, la investigación y la cultura como divisa.

Premio Viajero en el Tiempo Gravite.
Foto: Carlos Gil

Dado el arrollador éxito que el pasado año tuvo su cuarta temporada, no entiendo cómo es posible que RTVE, que tiene un filón en sus manos, no haya encargado a Javier Olivares la quinta entrega de la serie. Me parece algo inconcebible. Si hay un producto que responde al espíritu de lo que debería ser una televisión pública es ‘El Ministerio del Tiempo’. ¿Se acuerdan cómo ardían las redes toda la noche, después del capítulo de la semana? No sé, pero lo mismo habría que hacer un change.org y recabar firmas para su vuelta. Como mínimo, para un par de temporadas.

Jesús Lens

El inagotable manantial del cómic granadino

Una fuerte perturbación de sintió en la Fuerza cuando pudimos ver en las redes la portada del próximo álbum de ‘Blacksad’, de Juanjo Guarnido y Juan Díaz Canales. Unos días después, el sismógrafo volvió a temblar con el anuncio de una nueva candidatura a los premios Eisner para Gabriel Hernández Walta por ‘Barbalien: Red Planet’.

Así las cosas, los próximos meses van a ser pródigos en grandes cómics ‘made in Granada’, pero los aficionados no tenemos que desesperar, que ahora mismo hay en las librerías dos novedades, auténticas joyas del noveno arte, con marchamo granadino.

Astiberri publicaba ‘Bartleby, el escribiente’, de José Luis Munuera, a partir del archiconocido relato de Herman Melville. Se trata de una preclara adaptación de una historia tan aparentemente sencilla como complicada de llevar al mundo de las viñetas. Un reto del que Munuera sale más que airoso con un álbum cuya trama transcurre en el pasado, pero es de la máxima actualidad.

¿Quién no ha pronunciado alguna vez el famoso ‘preferiría no hacerlo’? O, al menos, ¿quién no lo ha pensado, ante una proposición que no le parecía apropiada ni procedente? Digámoslo alto y claro: Bartleby somos todos. De ahí que el Wall Street de antaño que nos muestra Munuera sea cualquier ciudad del mundo contemporáneo.

Al comienzo del álbum, uno de los personajes pronuncia esta sentencia: “La mayoría de los hombres sirve al estado no como hombres, sino como máquinas”. En estos tiempos en que las grandes corporaciones tienen más poder que la mayoría de los estados, ¿hay alguien que no comulgue con las palabras de Thoreau, adaptadas a los trabajos robotizados del siglo XXI y al control de las tecnológicas de nuestro tiempo de ocio, dirigido por los algoritmos?

Munuera lo hace (casi) todo en esta adaptación de ‘Bartleby, el escribiente’, pero es esencial destacar, y así lo especificaba el autor en su excelente entrevista de hace unos días con José Enrique Cabrero, la importancia del color de Seydas para imprimir al relato el tono ocre y de cuento melancólico que tan especial lo hace. ¡Adoro ese Nueva York!

Por su parte, Ponent Mon editaba hace unas semanas el integral de ‘Los Mentores’, lo más reciente de esa pareja artística de talento inconmensurable que conforman el guionista Zidrou y nuestro Francis Porcel.

En este caso, una distopía ¿futurista? con ribetes negros y criminales nos adentra en una trama de robo de niños que, sin embargo, es muy distinta a lo que ustedes están pensando. O no. Les confieso que solo he hecho una primera lectura del álbum, y demasiado acelerada, ansioso por llegar al final, pero Joye ya es uno de mis personajes favoritos del año.

Y la ‘zumbada’, claro. Esa mujer en una misión, como los grandes héroes de la literatura, que contra y viento y marea siguen adelante, cueste lo que cueste. “¿Te has fijado en que en las historias de polis y cacos nadie se preocupa nunca por las víctimas? ¡Los asesinos en serie, eso es lo que vende! Las víctimas, en cambio…”. ¡Uf! Y ojo al tratamiento visual y argumental de la tierra almeriense, mucho más allá de lo meramente paisajísitico. Y a lo simbólico de un Mediterráneo que… Tengo que releer ‘Los Mentores’ para sacarle todo el jugo, que hay mucha chicha ahí.

Pero, sobre todo, quiero escuchar a los artistas, a los propios Porcel y Munuera. Tendremos ocasión de hacerlo el próximo miércoles, en el marco del festival Gravite patrocinado por CaixaBank y CajaGranada Fundación, en el Centro Cultural CajaGranada. Conversarán con Enrique Bonet y Alejandro Romero, respectivamente, antes de que el escritor Alejandro Pedregosa y el pianista Carlos Arriezu nos conduzcan a los años ochenta, cuando las drogas y los sueños idealistas de la juventud se mezclaron en cóctel confuso y terminal. Para no perdérselo.

Jesús Lens

De puertas y umbrales

El pasado febrero anunciábamos las fechas de la tercera edición de Gravite, festival cultural que fusiona ciencias y letras, pasado y futuro, con el viaje en el tiempo como protagonista. Irá del 15 al 20 de junio y las puertas tendrán un gran protagonismo en nuestro programa.

Lo explicábamos así: “las puertas como elemento simbólico que comunican mundos diferentes, en la estela de Aldous Huxley y su famoso libro ‘Las puertas de la percepción’ o del grupo The Doors y la leyenda de Jim Morrison: hay cosas conocidas y cosas desconocidas. En el medio están las puertas”. Así las cosas, Gravit3, patrocinado por Caixabank, propondrá un recorrido histórico-artístico por algunas de las puertas más señeras y reconocidas de Granada.

El pasado viernes fui, por fin, a la librería Inusual, abierta en mitad del caos provocado por La Cosa. Tenía muchas ganas de conocerla, que fotos y comentarios eran de lo más halagüeño. Paseando por sus diferentes mesas y expositores, cuando estaban a punto de cerrar y ya me iba, un libro me saltó a la vista… y a punto estuvo de saltarme un ojo. Se titula ‘Umbrales’, es de Óscar Martínez, lo edita Siruela en su Biblioteca de Ensayo y lleva como subtítulo ‘Un viaje por la cultura occidental a través de sus puertas’.

Les confieso que me entraron palpitaciones. ¿Por qué no tenía noticia alguna de ese libro? Al cobrarme, la entusiasta librera me sacó de dudas sin que yo le preguntara: resulta que lo había recibido el jueves por la tarde, lo acababa de colocar en su sitio y, aunque le había echado el ojo y le tenía ganas, aún no había tenido tiempo de echarle un vistazo.

Nada más llegar a casa llamé a Gustavo Gómez, socio, compañero, confesor y amigo. “Creo que tengo una joya literaria en mis manos para Gravit3. Va de diferentes puertas del mundo. Las hay romanas, egipcias, prehistóricas y de castillos, palacios y villas”. Apenas había leído el arranque de la contraportada, que una gran faja cubría el resto. Al quitarla y seguir leyendo, el hurra: ¡el autor ha incluido una puerta granadina!

¿Qué puerta es? Ni es granadina esta puerta ni tiene por qué estar en el libro

No les voy a decir cuál. Les dejo que lo busquen. A la hora de escribir estas líneas, ya llevo más de la mitad de libro leído. Y me está gustando tanto que lo resumiré en un eslogan facilón, pero elocuente y descriptivo: es el ‘Infinito en un junco’ de las puertas. Ahí lo dejo.

Jesús Lens

¡Dad vida feliz!

Desde hace la intemerata de tiempo, este 24 de diciembre me gusta celebrarlo con el tradicional cuento de Navidad o relato de invierno. La costumbre me viene de los tiempos de Paul Auster y aquel maravilloso ‘Cuento de Navidad de Auggie Wren’, pieza insuperable cargada de emoción y sensibilidad.

Este año, sin embargo, he sido incapaz de escribirlo. No les voy a ocultar que la realidad es tan absorbente que cualquier ficción palidece a su lado. Tenía una idea, creo que buena. Gracias a Amanda, la auténtica y genuina Homeroteca de IDEAL, había encontrado una noticia publicada el 31 de mayo de 1932: el novelista HG Wells se encuentra de visita en Granada. “Admirado de nuestra ciudad, aunque no pensaba quedarse más de un día, ha prolongado su estancia para tres o cuatro”. ¿Qué hizo el fantástico novelista durante aquellos días?

“Hemos visitado al ilustre escritor para saludarle y ofrecernos durante su estancia en ésta, negándose de momento a hacer ninguna clase de manifestaciones a la prensa”, escribía el plumilla de entonces.

Había pensado alojar a Wells en el Alhambra Palace y llevarle a la tertulia del Rinconcillo o al Ateneo, que está documentado que participó en alguna de aquellas reuniones. Quería juntarle con Lorca y sus coetáneos, a los que enseñaría cómo fabricar su prodigiosa máquina del tiempo, a sabiendas de lo que pasaría apenas cuatro años después. El plan de fuga iba a ser un sencillo homenaje a esa serie tan maravillosa, ‘El Ministerio del Tiempo’, una de las mejores cosas que nos han pasado durante este año aciago. Lo vinculaba a esta columna sobre El Ministerio del Tiempo a la granaína.

Pero, como les digo, no lo he logrado. Empezaba a escribir y era incapaz de concentrarme. En este presente tan complejo, extraño y amenazador, me resulta imposible encapsularme en un universo de pura ficción, aunque sea durante unas horas. Seguiré perseverando en el intento, no obstante. A continuación tenéis el Cuento de Navidad de 2019, 2018  y 2017. En esa página están enlazados los de años anteriores.

Celebramos la Nochebuena y la Navidad. A estas alturas, ponernos en plan admonitorio tampoco tiene mucho sentido. Ya sabemos qué hacer y, sobre todo, qué debemos evitar estos días, tratando de ser cerebrales y no dejarnos llevar por las emociones, las que surgen de forma natural y espontánea y las que son producto de una copilla de más.

Hace unos días vi un cartelito que me gustó mucho: ‘feliz naVIDAd’. Con esa idea me quiero quedar. Este año, démosle la vuelta a la Navidad y hagamos todo lo posible por proteger la vida. Este año… ¡Dad Vida Feliz!

Jesús Lens

5 años ocupando este Rincón

El jueves 25 de noviembre de 2015 se publicaba la primera entrega de esta sección que dimos en llamar ‘El Rincón Oscuro’ en homenaje a James Ellroy. Así comenzaba la aventura: “Granada Noir inicia una nueva colaboración en IDEAL… y en ella ofreceremos información, crítica y reflexión sobre películas, series, libros, cómics, fotografía, pintura y música relacionados con el género negro y criminal”. A continuación, sin más prosopopeya, una entusiasta crítica de una película conmocionante: ‘Sicario’.

Cinco años después, mientras esperamos que se confirme que ‘Sicario 3’ contará de nuevo con Benicio del Toro y con la vuelta de Emily Blunt, echo la vista atrás y me quedo alucinado con todo lo que hemos ido publicando a lo largo de este tiempo. Excepción hecha de algunas semanas de agosto, todas las semanas ha habido entrega de este rincón tan especial.

Aquellas primeras semanas de andadura marcaron cómo iba a ser la sección. La serie ‘Homeland’ siguió a la película de Villeneuve y, a partir de ahí, un thriller nórdico del novelista Jo Nesbo, el Blacksad de Canales y Guarnido y un artículo dedicado a los orígenes del género negro.

Esa ha sido la filosofía que he tratado de imprimirle a la sección desde el principio: utilizar el género negro y criminal para hablar de disciplinas diferentes, pero conectadas entre sí: literatura, cine, cómic, música, televisión, periodismo y no ficción. Porque en noir, además de ser una cuestión de ética, también lo es de estética.

Ha sido la filosofía que, de la mano, ha impregnado el festival que organizamos Gustavo Gómez y yo, ese Granada Noir patrocinado por Cervezas Alhambra y cuyo programa central de actividades tuvimos que suspender este año. Mientras sigan las cosas tan complicadas, continuamos la actividad cultural a través de las redes sociales y las salas de reunión virtuales. En ese sentido, aún no nos resignamos a que termine el 2020 sin entregar el Memorial Antonio Lozano a Gabriel Hernández Walta y Miguel Osuna ‘El Bute’ por Covidarte, aquella subasta de originales del cómic y la ilustración de artistas granadinos, organizada para apoyar a Granada Acoge.

Dar a conocer lo que se mueve en el espectro del genero negro que se hace en Andalucía y en Granada es otro de los objetivos esenciales de esta sección. En ese sentido, la lectura del tebeo de Enrique Bonet ‘La araña del olvido’ en enero de 2016 abrió un universo entre lo memorialístico y lo creativo que, cinco años después, sigue generando momentos para el disfrute y el recuerdo. Este año se ha cumplido el centenario del nacimiento de Agustín Penón. Granada iba a acoger un congreso internacional dedicado a la figura del primer investigador de la muerte de Lorca, que quedó aplazado al año que viene, pero diferentes talleres, lecturas y reportajes periodísticos mantienen con vida a una de las figuras esenciales tanto de Granada Noir como de Gravite, festival hermano dedicado al viaje en el tiempo que, patrocinado por Bankia, ya está tramando el contenido de su tercera edición, para el 2021.

Hemos hablado de las armas del crimen y hemos visitado, literariamente hablando, ciudades y territorios míticos del noir de los cinco continentes. Le hemos prestado especial atención a fenómenos geopolíticos como el yihadismo, tan conectado con el género negro. Y a la evolución del mundo del espionaje y los servicios secretos, con la desinformación convertida en arma de destrucción masiva.

Le prestamos mucha atención, también, a cuestiones como el tráfico de mujeres para la explotación sexual y a la obra de escritoras tan esenciales y comprometidas como Mabel Lozano, Marta Robles, Rosa Montero, Cristina Hidalgo y Berna González Harbour.

Y a las novelas y libros de no ficción escritos por periodistas en los que cuentan todo lo que, muchas veces, no cabe en los estrechos márgenes de los periódicos. Javier Valenzuela, Juan Madrid, Íñigo Domínguez, Quico Chirino, Carlos Augusto Casas o Tomás Bárbulo han pasado por este rincón con sus obras.

Los clásicos, por supuesto, también encuentran un hueco en esta esquina. Y la gastronomía, tan ligada al mundo del noir, desde los cócteles y los tragos a las comidas de la mafia. Hasta viajes en el tiempo de corte criminal hemos reseñado.

¡Ganas me dan de hacer una selección-recopilación de todo este trabajo y compilarlo de alguna manera! Mientras, seguimos leyendo novelas, tebeos y ensayos. Viendo cine, televisión y documentales. Buscando cuadros y escuchando música que conecten con el noir. Y contándoselo a ustedes, semana a semana.

Por todo ello, muchas gracias a IDEAL y a los diferentes responsables de su sección de cultura que, a lo largo de estos cinco años, han mantenido y renovado su confianza en este rincón oscuro. Les confieso que escribirlo cada semana es un desafío. Resulta difícil no repetirse y, a la vez, intentar estar al día en todo lo que se mueve en torno al género. Ojalá que, en 2025, podamos celebrar el décimo aniversario. ¡Salud!

Jesús Lens