Media Maratón del Melocotón 2013

Escribía hace unos días sobre aquella Media Maratón de Motril de hace uno años, absolutamente imposible, infausta y decepcionante. Un fiasco. Del que aprendí mucho. (Atentos al Hashtag #Dayforfailure y a esta iniciativa de Guadalinfo)

La de hoy, en Guadix, la popularmente conocida como Media Maratón del Melocotón ha sido, de largo, peor que aquella.

 Media Maratón Guadix 2013

¿Por qué, entonces, he estado tuiteando que estoy contento con el resultado?

Por dos razones: Por ir. Y por terminar.

Ir a una Media Maratón no es fácil. Es decir, no es fácil tomar la decisión de ir. Y hacerlo. Sabes que, voluntariamente, vas a someter a tu cuerpo a un castigo y a un desgaste brutales. Porque las Medias Maratones no son solo correr 21 kilómetros. Es más. Mucho más.

 Media Maratón Guadix

Y, desde luego, si estás tan flojo como yo, que en los últimos meses apenas he pasado de los 14 kilómetros en un puñado de recorridos; correr una Media Maratón es excesivo. Joder. ¡Si lo más que he hecho, de mayo/junio hacia acá, desde que empezó el calor, han sido un par de sesiones de 15 kilómetros, a lo sumo! Con tres semanas de parón, entre julio y agosto…

Por eso, haber decidido ir, y haber encontrado la complicidad de mi Alter, que ha inaugurado nuevo Blog, José Antonio Flores Vera; ya es meritorio.

Y haber terminado… ¡más!

Primero, porque la Media Maratón de Guadix es durísima. Sin un metro plano. Segundo, porque hacía un calor terrible. Y, tercero… ¿tengo que repetirlo? ¡Porque me faltaban una cantidad de kilómetros importantes en las piernas!

Por supuesto, este crack NO soy yo. Él si acumula kilómetros en las piernas...
Por supuesto, este crack NO soy yo. Él si acumula kilómetros en las piernas…

Foto: Susana Molero Hidalgo

Es como si, tras una decente Media Melocotonera el año pasado y el fracaso en la Media Maratón de Granada del año pasado, que fue una calamidad, hoy se hubiera cerrado el círculo.

Porque, roto, extenuado y destrozado como estoy ahora; ya pienso en los próximos entrenamientos, de cara a las Medias Maratones de Motril y Granada. Que, espero, me saldrán mejor. Espero.

Porque, efectivamente, en esto de las carreras de fondo hay un punto de masoquismo y drogadicción que nos tendríamos que hacer ver.

La recompensa: un puñado de melocotones
La recompensa: un puñado de melocotones

Y ahí queda mi resumen de una carrera a la que, probablemente, no debería haber ido. Pero que conseguí terminar.

Por segmentarla, podríamos decir que, hasta el kilómetro 7, todo fue bien. Del 7 al 14, aguanté. A partir del 14, empecé a ir tocado. Y desde el 17, absolutamente hundido, con las pulsaciones a 150 para invertir 7 minutos en cada kilómetro, mientras era rebasado por decenas de atletas.

A ver si las cámaras de GesCon Chip captaron mi entrada en meta. Una entrada dedicada a la gente del Bar Restaurante La Catedral de Guadix.

A ver.

Lens media maratón melocotón 2013

Porque si hay que morir… ¡que sea por una buena causa!

Y ahora… ¡seguimos!

Jesús Lens

En Twitter: @Jesus_Lens

PD.- Mientras yo sufría de lo lindo en Guadix, dos tipos llamados Kenenisa Bekele y Mo Farah también corrían una Media Maratón. En Newcastle. Atentos al brutal final de carrera. Ellos apenas sobrepasaron la hora en cumplimentar el recorrido de 21 kilómetros. Me consolaré pensando que, en Inglaterra, no hacía tanto tanto calor como en las Bad Lands accitanas… 😉

Talese

«El deporte es tan justo que es cruel. Solo unos pocos llegan a la cumbre gracias a una combinación de esfuerzo y suerte. Sobre todo lo primero, porque necesitas esforzarte mucho para llegar a una situación en la que la suerte te ayude».

El periodismo de Talese: «un periodismo de estar allí».

Talese

«Es lo que hice en la Mafia. Les dije: cuando muráis, lo único que quedará de vuestra vida será lo que el FBI diga a la prensa. Si me contáis vuestra versión, yo le explicaré a la gente cómo es, de verdad, ser como vosotros, cómo es estar en vuestra piel».

El silencio del héroe

¿Me sigues en Twitter? @Jesus_Lens

La democracia es correr

Hoy, en IDEAL, uno de esos artículos que cíclicamente escribo sobre esa «nueva» religión. La Religión del Correr. Una religión misteriosa y silenciosa, pero que cada vez cuenta con más adeptos. Una religión que reconcilia cuerpo y espíritu y que solo trae cosas buenas. 
 
A ver qué te parece.
Dedicado a los últimos en llegar 
Me preguntaba mi amiga Alma si tenía sentido, al terminar de correr, escuchar la famosa canción “We are the Champions”. Y lo que ella no sabe es que fue, precisamente bajo esa premisa, que empecé a participar en el Gran Premio de Fondo de la Diputación de Granada, hace ya cuatro o cinco años, conchabado con mi amigo Álvaro, compañero de trabajo y baloncesto. “Cuando corres, no es como cuando echas unas canastas o juegas al tenis. Cuando corres, siempre ganas”. Si pudiera, imprimiría esa máxima alvarina en los sobres de azúcar de las cafeterías: cuando corres, siempre ganas.
We are the champions
Lo tengo muy hablado con mi hermano: correr es el deporte más democrático que hay. Es barato, en primer lugar,  ya que en el mercado hay zapatillas y ropa técnica para todos los gustos, tendencias y bolsillos. En segundo lugar, es extremadamente sencillo: te calzas, te ajustas los cordones y… ¡voilá! No hace falta ningún tipo de infraestructura, aparataje, equipo, aprendizaje o coordinación. No hay que reservar pistas, no hay que contar con ni depender de nadie. Solo hay que salir de casa, dar un primer paso y comenzar a trotar.
Y después están las carreras populares. La gente que no suele correr, mira y comprueba el puesto en que quedaste clasificado… e ironiza sobre el particular. Los trotones habituales, sin embargo, se interesan por el tiempo que hiciste. Y ahí es donde radica la máxima democratización de este deporte. En el tiempo.
Estos, en realidad, eran unos tiranos ;-)
Estos, en realidad, eran unos tiranos 😉
Por ejemplo, en la pasada carrera disputada en Loja, un precioso circuito rompepiernas que recorrió toda la localidad y sus alrededores, ¿quién tuvo más mérito? ¿José Manuel, que llegó el primero, invirtiendo en el recorrido menos de 42 minutos; o el último clasificado, que pasaría por la meta transcurrida una hora y media desde que el juez diera el pistoletazo de salida?
En principio, la lógica competitiva nos llevaría a pensar que el campeón es quien más se ha esforzado y, por tanto, el que más mérito tiene. ¡Por eso sube a lo alto del pódium y se marcha a casa, con una preciosa medalla prendida del cuello! Pero… ¿y ese farolillo rojo? ¿No tiene el mismo mérito, por ejemplo, Pilar Moleón, la abuela del pelotón que, contra viento y marea y a sus más de setenta años, termina todas las carreras del Circuito, incluyendo las Medias Maratones? ¡Y, a veces, no es la última en cruzar la línea de meta!
Si hace tiempo que no practica deporte, piense el lector en sus años mozos, cuando estaba en el colegio y en el instituto. Haga por recordar lo que suponía cumplimentar los cinco o diez kilómetros necesarios para aprobar la asignatura de Educación Física. Y es que, en una carrera popular, el mismo mérito tiene el que gana como quien llega el último. Porque, corriendo, uno compite única y exclusivamente consigo mismo. Y contra un enemigo, mortal: la pereza, la molicie, el abandono, la vaguería y la dejadez.
Burlando a la molicie, ¿verdad amiguete viajero?
Burlando a la molicie, ¿verdad amiguete viajero?
Por eso, querida Alma, la respuesta a la pregunta con que empezaba este artículo es que sí. Rotunda e inequívocamente sí. De hecho, cuando termines de correr, nunca preguntes por quién suena el “We are the Champions”; suena por ti.
También corremos en Twitter: @Jesus_Lens
Ahora, a ver los 12 de marzo de 2008, 2009, 2010, 2011 y 2012

Gran Premio de Fondo de Diputación Armilla 2013

Cambio de recorrido. Solo una vuelta, que fueron unos 9 kilómetros. ¿Mejor que el anterior? AQUÍ, la reseña del año pasado y un buen debate que organizamos

Para mí, sí. No me gusta eso de tener que dar dos vueltas al mismo circuito, aunque haya sido necesario meternos en un polígono industrial un tanto siniestro, en domingo. ¿Será por eso que a tantos corredores nos ha dado amago de flato al pasar por allí? Pero bien por la gente de Diputación, que no deja de trabajar por mejorar las cosas y hacer cada carrera mejor que la anterior.

Hoy hacía frío. Y viento. Pero éramos unos mil quinientos chiflados en la línea de salida. Ese récord de participación supone que el arranque de la carrera tenga que ser necesariamente atropellado y complicado. Sobre todo, si mi hermano y yo nos situamos casi al final del pelotón.

Y si, encima, me encierro a mí mismo en el carril bici, más blindado que Fort Knox… En fin. Daba igual. Tampoco quería forzar la costilla. Aunque luego…

¡Luego me salieron varios kilómetros en el entorno de los 4,30-4,40 minutos, lo que está muy bien, para lo chungamente que he estado entrenando estos días!

100 metros más y no llego, me dice Augusto, autor de la foto
100 metros más y no llego, me dice Augusto, autor de la foto

Al terminar, saludo a algunos amigos y salimos a escape. Y es que, tras el suculento y exquisito, privilegiado y lujoso menú nocturno desgustado el sábado en Chez Hoces (dos tipos de tortilla de patatas, jamón, ensaladilla de pimientos, dos tipos de pastela moruna y taco de atún con mermelada de tomate caramelizado y sésamo; pespunteado con un tiramisú y mojitos varios) no tenía ganas ni de tomar una cerveza.

Sí me quedé desconcertado con la Bolsa del Corredor, que no depende de Diputación, ya que la camiseta de talla única, la M, para un mostrenco como yo, es una ridiculez. Y me estaba quedando helado.

Así que, tiramos millas para recoger a Mamen y las niñas y disfrutar del resto del domingo, cogiendo aceitunas. Me gusta eso de convertir el fruto que está en el árbol en aceite que nos llevamos, por la tarde, de la almazara. Toda una lección para Julia y Carmela… ¡y para nosotros los mayores, qué demonios!

No suelo quedarme a las entregas de trofeos. Ni siquiera la posibilidad de llevarme un jamón en un sorteo hace soportable aguantar una hora a pie firme, entre pitos y flautas. Prefiero irme a un bar y pedir una buena Alhambra Especial, helada, con su tapa.

Me dicen que la cantidad de cerveza gratis, en meta, cada vez es más exigua. Lo ignoro. Es posible. Yo reconozco que prefiero una buena organización, generosa hidratación durante recorrido, buena señalización y atención médica que todo lo referente a la Post-Carrera. Máxime cuando se ve a gente que no ha corrido bebiendo cerveza por el morro o, en algunos lugares, ocupando los pocos bancos o asientos en que los atletas pueden descansar al llegar, en algunos casos, deshidratados, doloridos y muy perjudicados.

A medida que esto de correr se va popularizando y somos más la gente que participamos en el Circuito de Fondo de Diputación, más generosos y comprensivos tenemos que ser, unos y otros. Señores que no corren: ¡no consuman la bebida de quiénes nos dejamos la piel en el asfalto! Un poquito de decoro, por favor.

Señores que vamos a rodar medio lentos: ¡pongámonos a mitad de pelotón y no demos codazos por situarnos al principio, para terminar rebasados por cientos de corredores, a los que estorbamos y molestamos! Y quiénes piensen ir muy lentos, pues sitúense al final de la partida. Que no pasa nada.

Una llegada aglomerada
Una llegada aglomerada

Y señores de los ayuntamientos: gracias por su contribución y apoyo al Circuito. Pero échele un poquillo de cariño a las Bolsas del Corredor. A fin de cuentas, ahí va la imagen de su localidad. Ya que hacen el esfuerzo de cortar las calles, de poner la policía local a disposición de la organización, de buscar voluntarios… no escatimen con una camiseta que, después, podremos lucir con orgullo por esos caminos, en nuestros entrenamientos. Además de evitar que nos quedemos pajaritos en la meta.

Es cierto que estamos en tiempos de estrechez. Pero los corredores también contribuimos, estos domingos, a darle vidilla a los bares, cafeterías y hoteles de sus localidades. Y tanto mejor hablaremos de las mismas cuanto mejor nos traten a través de algo tan simbólico como una buena o mala camiseta.

Quid pro quo!

Gracias a todos, comprueba tu clasificación, mira tu entrada en meta a través de IDEAL y haz una portada con tu imagen y… ¡nos vemos en Albolote!

Jesús Lens

A ver los 3 de febrero de 2008, 2009, 2010, 2011 y 2012.

All in for the D Rose

A veces la publicidad es tanto o más atractiva e inspiradora que el cine. Este anuncio me encanta. Y me encanta cómo los yanquis saben vender su producto y sacar rentabilidad económica y emocional hasta de una lesión.

Vamos que el estreno más esperado de la temporada, es este The Return»…

D Rose

Jesús Lens

 

A ver el 30 de enero de 2009, 2010, 2011 y 2012