Buenas, soy Emilio Calatayud. Un amiga, que como todas las madres ayuda a sus hijos a hacer los deberes, me dice que está a punto de apuntarse a una academia de repetidores de ESO porque no entiende lo que dicen los libros de su niña. Le digo: ‘No será para tanto’
Y ella me manda un fragmento del libro de Ciencias Naturales de sexto de Primaria para que me haga una idea: «1. La sangre, que ha recogido los nutrientes obtenidos en la digestión y los desechos de todo el cuerpo, entra por las venas cavas a la aurícula derecha y pasa al ventrículo derecho.
«2. La sangre sale del ventrículo derecho por la arteria pulmonar y va a los pulmones. En los alvéolos pulmonares, deja el dióxido de carbono y se carga de oxígeno.
«3. Desde los pulmones, a través de las venas pulmonares, la sangre rica en nutrientes y oxígeno llega a la aurícula izquierda, etc».
Yo tampoco lo entiendo, ¿debo preocuparme? Y otro día hablamos del lenguaje de las sentencias judiciales, que también tiene tela. O de los folletos que acompañan a las medicinas…
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