Hay un principio que dice que los jueces hablan a través de sus sentencias y, como es lógico, estoy de acuerdo. Pero también creo que los jueces no solo deben hablar a través de sus sentencias. Me explico. En el caso de los desahucios han sido muchos los compañeros -y todas las asociaciones- que han hablado sobre este drama y han contribuido -junto a otras muchas personas y sectores: hasta los policías y los cerrajeros se han revuelto- a que los partidos se decidan a pactar para intentar impedir que no ocurran más desgracias. Creo que todos debemos felicitarnos por ello. Gracias a Dios, cuando los jueces hablan -de viva voz y no solo a través de sus sentencias-, pueden ayudar a mover las conciencias de los legisladores y posibilitar los cambios. Nos alegramos.
Deja un comentario