SARA OBLISAR Y EL ARTE ON LINE

¿Os gusta el arte? ¿Tenéis y/o compráis óleos, grabados, litografías, etcétera? ¿En galerías?

 

Y, la pregunta, ¿qué os parece Internet como vehículo para la adquisición de arte?

 

Manotratos
Manotratos

Hace unos días, Silvia me pasó un DVD con información sobre una joven y prometedora artista serbia llamada Sara Oblisar.

 

La venganza de la mano loca... ¿no da como para escribir un Cuento?
La venganza de la mano loca... ¿no da como para escribir un Cuento?

Me gustaron algunas de las cosas que hace y me lancé a olisquear en Internet, donde me encontré con su web, alojada en el portal Artelista.com

 

¿Un pie o el continente africano?
¿Un pie o el continente africano?

Y cuando le doy a «Ver Exposición Virtual del Artista», no sólo me despliega las diapositivas con las obras, sino que pone el precio de las mismas e invita a comprarlas.

 

Me gustan mucho las que podéis ver en esta entrada.

 

Y el dedo pide hacer click. Pero la cartera no quiere ni oír hablar de liberar a la VISA y lanzarla libremente por el ciberespacio.

 

Otro Manotrato de Sara Oblisar
Otro Manotrato de Sara Oblisar

El caso es que… no sé qué hacer.

 

En serio: ¿tú que harías?

 

 

Jesús Lens, dudoso perplejo.

 

 

PD.- Aprovechamos para iniciar una de esas encuestas on line, en la margen derecha. ¿Qué os parece esto del arte on line? La de los E books ha sido muy reveladora: para el 56%, el E book terminará abriéndose un hueco en nuestra vida, aunque le costará, y para 17% triunfará sin ambages.

 

Para el 10%, arrasará y un 15% piensa que, al contrario que la música o el cine, los libros on line serán un fracaso.

 

A ver qué pasa con el arte…

 

Anímense a participar, que septiembre ya está aquí y hay que activarse.  

E BOOKS vs. PAPEL

De todos los argumentos a favor de la pervivencia del libro de papel frente al E-book o libro electrónico, que ya asoma insistentemente su patita virtual por debajo de la puerta, el más sólido y el que más me ha hecho reflexionar lo leí en este artículo que ayer publicaba El País: «Nostalgia del papel», de Bernal Freiría, aunque matizado.

 

¿Acabará con el libro tradicional?
¿Acabará con el libro tradicional?

«Desaparecerán los préstamos de libros entre amigos, ese placer de compartir», señala el autor de un artículo ciertamente clarividente.

 

Ustedes, que ya me van conociendo, saben que no presto libros a los amigos, precisamente, porque quiero que sigan siéndolo. Pero me encanta regalarlos. Y dedicarlos, firmarlos. Marranearlos. Pocos placeres como el de pensar en alguien y elegir para esa persona el libro idóneo, el que le gustará, le aterrorizará, le enganchará, le asqueará, le intrigará, le excitará… los libros, los buenos libros, han de provocar sensaciones. Y ponerle unas letras manuscritas en sus primeras páginas, dejando una impronta en el papel, teóricamente eterna, es uno de los placeres a los que no quiero renunciar.

 

¿Renunciaremos al placer de dedicar libros?
¿Renunciaremos al placer de dedicar libros?

Y, aunque pueda parecer viejo, trasnochado y añejo… ¿cómo provocar sensaciones en alguien a quién aprecias a través de la recomendación de una descarga en un aparato electrónico?

 

El tránsito
El tránsito

Aunque todavía no terminaba de verme yéndome a la cama con otra pantalla a cuestas -adoro leer en la cama- hasta ayer mismo estaba convencido de que el E-book, como el DVD, el CD o el iTunes, terminaría imponiéndose al libro analógico. Pero, afortunadamente, Freiría me ha dado el argumento definitivo que me hace pensar que el libro es distinto a los discos o las películas. Que es un objeto que se disfruta por sí mismo. Que es bello, hermoso y valioso tanto por su contenido como por el continente en que viene impreso.

 

No sé cómo lo ves tú y qué te parece.

 

¿Tiene futuro el libro impreso en papel? ¿Convivirá con el E-book? ¿Desaparecerá, para gran regocijo de árboles y bosques? ¡Hablad! ¡Manifestaos!

 

Vamos a poner una de esas Encuestas, que tanto nos gustan, en la Margen Derecha de la pantalla, para ver qué opinamos sobre el particular, a lo largo de Agosto…

 

Jesús Lens, analógicamente libresco.