LINCE PERDIDO, GOYA ENCONTRADO

Hace unos meses, nos hacíamos eco de la súplica de «El lince perdido». Después, alabábamos la labor de Kandor Graphics desde las páginas de IDEAL. A través del Twitter nos alegrábamos el éxito de la película en los Goya, llevándose el de Mejor Película de Animación.

 

Y, casualidades de la vida, hoy pudimos disfrutar en la Sede Central de CajaGRANADA de sentirnos partícipes y protagonistas del triunfo, aunque fuera por un rato.

 

En estas fotos, gentileza de los Medios Audiovisuales de CajaGRANADA…

 

Una amplia representación del Reparto y el equipo, posando con el Goya.

 

Aquí, Inma y Silvia, auténticas Protagonistas de la velada.

 

Y el MicroDire y Raquel, la otra gran Protagonista, que nos merecemos el galardón por nuestro trabajo en «La cena del Pavo», una peli muy, muy divertida.

 

Jesús Lens, goyesco.  

OTRA GRANADA

La primera columna del año, en IDEAL. A ver qué les parece.

 

Kandor Graphics. ¿Les suena? ¿Y Almed? Quizá no. Pero si hablamos de una película como «El lince perdido», que ojalá esté batiendo récords de taquilla, y de un libro titulado «Los sueños de mi padre», autobiografía de Barack Obama, seguramente sí sea más fácil ubicarnos. ¿Y qué tiene que ver Obama con el lince de Banderas? Pues que ambos proyectos, uno editorial y el otro cinematográfico, están radicados en Granada. Y que ambos tienen proyección internacional, habiendo encontrado eco y cobertura en los medios de comunicación de todo el país.

 

Dejando aparte la cuestión turística y monumental, no es fácil que nuestra tierra suene más allá de nuestras fronteras. Salvo por noticias chuscas o desastrosas, quiero decir, que todo es posible en Granada. Por eso es muy de destacar la labor que, entre lo cultural y lo empresarial, desarrollan personas como Jerónimo Páez, predicadores con el ejemplo, que hacen cosas y van más allá de las meras proclamas, filípicas o declaraciones de intenciones.

 

La editorial Almed es modélica, habiendo publicado libros exquisitos y de una factura formal admirable. Si pasan por una librería, deléitense pasando los dedos por las hermosas ediciones de los títulos dedicados a la historia de Constantinopla, Florencia o de esas tres puertas del Mediterráneo que cuenta Daniel Rondeau. Pero, además, tenemos la suerte de poder disfrutar de libros necesarios y esenciales para comprender el mundo de hoy, de «Los Vulcanos. El gabinete de guerra de Bush» a la referida autobiografía de Obama o los interesantísimos «Marruecos en transición» o «Islam y libertad».

 

Como envidiable es lo que han hecho Manuel Sicilia y Raúl García con «El lince perdido», nominada a los Goya como «Mejor película de animación» y producida por Kandor Graphics, una empresa a caballo entre Granada y Los Ángeles con un currículum envidiable, un portfolio que quita el hipo y una lista de clientes que acredita a los Kandor como unos auténticos cracks: formados en Pixar, han puesto su talento al servicio de ideas y propuestas que, basadas en nuestro imaginario más cercano, están llamadas a trascender fronteras.

 

Qué alegría comprobar que tenemos en Granada a personas que, interesadas por la cultura, están fuera de las vendettas de los vates locales, habiendo sido capaces de poner en marcha proyectos empresariales que apuestan por una radical independencia de contenidos, logrando éxito y reconocimiento más allá de los asfixiantes límites de nuestro entorno.

 

Ejemplos de que otra Granada es posible. Una Granada que, sin titubeos, pelea con las grandes multinacionales de la edición y la producción cinematográfica, poniendo el talento de personalidades de todo el mundo al servicio de proyectos empresariales de aspiración global, pero con inequívoco acento local. Una Granada globalizada, moderna, sin complejos, con las miras fijadas en los cuatro puntos cardinales del planeta.

 

Jesús Lens Espinosa de los Monteros.