VENGA A HABLAR DE NUESTRO LIBRO…

Pues sí, mis Estimados. Este sábado volvemos a hablar de nuestro libro. No del nuevo, que ya he empezado a corregir, a la espera de ver si encuentra salida, sino del anterior, de ese «Hasta donde el cine nos lleve» que tantas alegrías nos ha dado.

Si pincháis AQUÍ, veréis una reseña del mismo en el protal «Sobre turismo», lo que nos llena de alegría y satisfacción a Fran Ortiz y a mí. Pero ojo, que si queréis saber y ver cosillas del nuevo libro en que estoy enfrascado, podéis pinchar AQUÍ y  agregar la página a vuestro perfil y seguir de cerca sus evoluciones.

 

Ahora que se acaban las vacaciones de tanta y tanta gente es buena ocasión para viajar desde casa, con libros y películas.

 

Este sábado lo dedico a perserverar en el Talles de Narrativa Creativa y Coaching literario que estoy haciendo con Carlos Salem y del que muy pronto tendréis noticias. Os aconsejo que vayáis afilando ideas, que este otoño va a ser de mucho escribir.

 

¡Hablamos!

 

Jesús Lens, venga a hablar de su libro 😉

CRACOVIA SIN TI

Querido amigo Carlos… temo.

Temo que si escribo y publico lo que pensaba escribir y publicar sobre «Cracovia sin ti», a la sazón, novela ganadora del Premio Seseña de Novela Romántica, mis palabras sean malinterpretadas, bien porque la gente piense que lo mucho que me gustan tus novelas puede revelar otro tipo de gustos que vayan más allá de lo puramente literario, bien porque, sencillamente, los peor pensados consideren que tú escribes las críticas elogiosas de tus novelas y yo las firmo y publico. O, en clave Finan-PP, que cobro, en efectivo o en especie, por escribirlas. Y publicarlas.

El caso es que, repasando mis mejores «Mementos Lectori» de estos meses, siempre acaban apareciendo títulos tuyos, cono «Camino de ida» y «Pero sigo siendo el rey» a la cabeza. A qué vamos a engañarnos.

Y, mira qué pasa: cuando las recomiendo, algunos de mis más exigentes y desconfiados lectores me preguntan eso de:

– «¿Pero es novela negra?».

Yo les respondo que las novelas de Carlos Salem son inclasificables. Pero no sé… creo que les queda un atisbo de duda. Aunque en Granada y alrededores, en este Pateando el Mundo, tus seguidores son legión y espero que aprovechen esta Entrada para hacer profesión de fe. Si, en su momento, las Brujas de Salem provocaron un enorme revuelo, vamos a intentar que los Legionarios de Salem conviertan a esta «Cracovia sin ti» en el mejor regalo posible para el Día de la Madre.

¡Queremos a Carlos firmando libros en Granada!
¡Queremos a Carlos firmando libros en Granada!

Publicada por la editorial Imagine ediciones, «Cracovia sin ti» es una novela 100% Carlos Salem. Y, aunque no me haga feliz reconocerlo, que ya sabéis bien cuál es mi esencia negra y criminal, podemos proclamar que ¡NO! «Cracovia sin ti» NO tiene nada de negro y criminal y sí mucho de amor, desamor, deseo, amistad, nostalgia y muchas otras de esas características que, afortunadamente, nos asemejan a los animales.

«Daniel y Gato mantienen una de esas conversaciones ideales que rara vez se dan: el hombre habla y habla, el gato escucha y sonríe. El humano le pregunta qué debería hacer y el felino sólo lo mira como diciendo: ya sabes lo que vas a hacer, así que hazlo de una vez y déjame dormir».

Y es que el gato Gato es testigo de la no-relación de amor y sí de amistad y deseo contenido entre Daniel y Daniela, las dos caras de una misma moneda, lo que parece hacer imposible que alguna vez lleguen a estar juntas.

Y sí. Aparecen algunos personajes de algunas de las novelas anteriores de Carlos, como os estaréis preguntando los Legionarios de Salem. Que a nuestro escritor de cabecera le gusta tender puentes entre sus obras, entre sus mundos, entre sus géneros. Y por eso, Salem es un género en sí mismo.

Y sí. También. Por supuesto. Hay bares en la novela. Los bares. Los grandes protagonistas de los relatos de Salem. Esos «Relatos de cerveza ficción: Yo lloré con Terminator 2», de los que (aún) no hemos escrito nada. En este caso, el Malone. Un garito con personalidad propia. Y sí. Obviamente. También hay un vejete de armas tomar que tiene que sacar los colores a esos jovenzuelos prepotentes y presuntuosos que se burlan de los Yayos que en esta vida son.

Y no olvidemos el marco en que se desenvuelve la historia: una agencia de marketing & publicidad, una de las religiones del siglo XXI. Otra más. Por tanto, si tuviéramos que definir «Cracovia sin ti» en una frase, diríamos que es «la romántica historia de D & D, con Gato como testigo y el Malone de fondo, en un ambiente muy de «Mad Men».

¿Es Carlos Salem un "Mad men"?
¿Es Carlos Salem un

¿Os la vais a perder?

Venga, Legionarios de Salem. Decid en alta voz, escribid sin rubor, eso de «Yo leo a Carlos y estoy orgulloso». Y vamos a ponérselo difícil al Corte Británico y convirtamos «Cracovia sin ti» en el sorprendente, agradecible e imprescindible Regalo Estrella del Día de la Madre (la que ya lo es y la que está por serlo, aunque ella todavía no lo sepa. Discriminaciones, las justas)

Jesús Lens Espinosa de los Monteros.

CARLOS SALEM Y LA CRESTA DE LA OLA

A veces, cuando recomiendo libros, pienso que soy demasiado subjetivo. Si tal es posible.

 

Pero cuando me encuentro mensajes como éste de Carlos Salem, veo que no. Que apostando, defendiendo, difundiendo y queriendo a Carlitos, acertamos de pleno. ¡Enhorabuena!

 

La cosa es más o menos así: alguien me sopla que, «probablemente» Aller Simple, la versión francesa de mi Camino de ida, podría llegar a ser candidata a los Prix 813 de novela policial, que se encuentran entre los más prestigiosos del país vecino.

 

A uno, que es inculto, el tema le suena, pero piensa que si le hubieran dado un ladrillo por cada «probablemente» que ha oído en su vida, tendría ya más casas edificadas que Iñaki Zuruaga alias El Zurullos (el que no sepa de quien hablo, que compre mi nueva novela «Pero sigo siendo el rey», editada por Salto de Página, je je).

 

El caso es que otro alguien me felicita esta tarde por teléfono y repito lo mismo: mientras no sea oficial, mejor no me altero.

 

Pero la curiosidad me pica y ahí está la jodida Wikipedia para acojonarme.

 

La Asociación 813 es una de las de mayor peso en cuanto al policial francés, y el premio en cuestión, (Mejor policial extranjero traducido al francés), lo ha ganado gente como Paco Ignacio Taibo II, Robin Cook, Donald E. Westlake, James Elrroy, Henning Mankell, Giancarlo di Cataldo o Patricia Cornwell.

 

¿A qué la lista asusta?

 

Así que decidí que alguien se había entusiasmado demasiado pronto, o había escuchado campanas equivocadas… vamos que no supuse una burla porque como todo el mundo sabe, no tengo enemigos… vivos.

 

De modo que volví al reportaje que debo entregar mañana sin falta si no quiero que mis posibilidades laborales se limiten al puesto de eunuco en un harén, agradeciendo la buena voluntad de los que entendieron mal o se apresuraron por cariño.

 

Entonces tuve que buscar un dato en el google y, ¿quién se resistía a asomarse a la web de la Asciación 813, eh?

 

Para ver cómo es, nada más…

 

Y me encontré esto:

 

http://www.813.fr/content/view/132/27/

 

 

TROPHEE POUR LE ROMAN ETRANGER OU RECUEIL DE NOUVELLES ETRANGERES :

 

 

Andrea Camilleri « Un été ardent » [Editions le Fleuve Noir]

 

RL Ellory « Seul le silence » [Editions Sonatine]

 

Craig Johnson « Little Bird » [Editions Gallmeister]

 

Dennis Lehane « Un pays à l’aube » [Editions Rivages]

 

Carlos Salem « Aller simple » [Moisson Rouge]

 

Vamos, que con esos nombres tengo menos posibilidades que Fernando Alonso este año en la F1.

 

Pero estar ahí  hace una ilusión que ni les cuento…

 

O por eso les cuento: para disfrutar haber llegado hasta ahí.

 

El premio se falla en octubre y mientras tanto ahí están Octavio y compañía, de cañas con los peces gordos.

 

Carlos Salem

PREMIOS SEMANA NEGRA 2009

Antes de entrar en el palmarés, te cuento, muy brevemente, que pienso que las presentaciones salieron muy bien. Arrancamos Fernando Marías, Fran y yo con nuestro libro de cine y viajes, que sorprende por el esquema usado en su estructura, al contar la historia del hombre a través de las películas en que el viaje es el gran protagonista. Viajes, migraciones, aventuras y descubrimientos que nos han hecho como somos, para bien o para mal.

 

Después, las presentaciones de las novelas de Oscar Urra y Carlos Salem también congregaron a mucho público, sobre todo la del argentino-español, una bestia de las relaciones públicas más sanas y mejor entendidas. Libros, presentaciones, poesía y un Luis García Montero descomunal, en la poesía, con un Félix Grande que hizo honor a su nombre. ¿Sabes? Ayer fue un día importante. Mucho. Uno de esos días que consolidan amistades y sientan las bases para alegres, felices y gozosos proyectos de futuro. El 16 de julio. Un día memorable, para recordar. Que lo sepas que así es. Y será.

 

Y con apenas unas horas de sueño, tras la velada poética y la charla en la terraza del Don Manuel con el Tiburón López, la gente de la editorial Salto de Página y Olivier, el menudo traductor francés, nos plantamos en la rueda de prensa que hizo públicos los Premios de Semana Negra 2009. Por cierto, que este año he estado vago como lector. Esta mañana me di cuenta, al no haber leído gran parte de las novelas candidatas. ¡Eso no puede ser! A ver, apunta: propósitos para estos meses: LEER MÁS. ¿Vale?

 

El premio al mejor relato policíaco fue para «Dioses y Orishas», del cubano Rodolfo Pérez Valero y que hoy publica A quemarropa. Ya te contaré qué tal es. Este año, además de leer menos, tampoco es que haya escrito más. Bueno, más si he escrito, pero hay que escribir más cuentos y relatos. A ver si el que mandé a IDEAL gusta al jurado. Se titula «Ella» y tengo muchas esperanzas con él. ¿Te lo mandé? ¿Te gustó?

 

El premio Celsius, a la mejor novela de Ciencia Ficción y Fantasía ha recaído en «Rojo alma, negro sombra», un título complicado para la novela de Ismael Martínez Biurrún, que se desarrolla en el Madrid actual, pero en el que unos crímenes del pasado vienen a interferir en las vidas de los habitantes contemporáneos de la capital de España. El autor, en la rueda de prensa, puso el acento en que se trata de una novela de emociones y sentimientos.

 

El Premio Espartaco a la mejor novela histórica, ésa que cada vez tiene más predicamento, ha sido para «Salamina», de Javier Negrete, premiado el año pasado con el Celsius por una novela de Historia Ficción en que se anticipaba ésta de Salamina, en la que recupera el tono épico de la fantasía, pero procurando ser riguroso con la historia y huyendo de cualquier tipo de maniqueísmo.

 

El premio Silverio Cañada a la primera novela negra de su autor escrita en castellano ha sido compartida por «Sé que mi padre decía», de Willy Uribe, una historia radicada en el Bilbao más negro y protagonizada por un gran pringao; y «Conducir un tráiler«, del mexicano Rogelio Guedea.

 

El Rodolfo Walsh a la mejor obra de no ficción recayó en Carles Quílez por «Mala vida» y fue, sin discusión, el premio más aplaudido de la mañana ya que, habiendo sido finalista en cuatro ocasiones, Carles ya se había ganado la fama de eterno perdedor. Sobre este autos y su obra te contaré más cosas en otro momento, que tiene unas teorían sobre el periodismo y la literatura tan interesantes como polémicas. Sólo recuerda ese título: «Mala vida».

 

Y me queda por comentarte el Premio Gordo, el Hammett, el más deseado, el más respetado, tanto por el nombre que lleva, como por la nómina de galardonados: la mejor novela policíaca del 2008. Que también ha sido compartido. Por un lado, David Torres, con «Niños de tiza», en que reivindica la vida de barrio en la época de la Transición, en las periferias de las grandes ciudades, con un guiño muy cariñoso a las personas que todavía tienen algo del niño que fueron. Y el coganador del Hammett fue Guillermo Saccomano, por su novela «77», en la que se habla de la Argentina de la dictadura, las sacas y los asesinatos de los jóvenes argentinos, fijándose especialmente en las complicidades de la sociedad civil, algo muy silenciado y que Saccomano quiere resaltar en su novela.

 

Como ves, Semana Negra ha premiado autores y libros de muy diferente extracción. No sé cuáles te interesarán más o cuáles menos, pero oyendo hablar a los autores, periodistas y editores, créeme, dan ganas de llevárselos todos en un tráiler, pedirse una excedencia y pasarse el año escribiendo.

 

Y como esto es la Semana Negra, sigue. Llueve. y, sin embargo, tengo la sensación de que es un gran día. Las ojeras las tengo que transportar en una carretilla y el cansancio es supremo. Menos mal, eso sí, que no hay Arehuca. Te seguiré contando, en cuanto encuentre una conexión, que ésta está cerrada mañana.

 

PD.- Desde el ordenador de atrás oigo la voz de José Manuel Fajardo, acaba de decir: «Habemus libro», estrechando la mano del glorioso fotógrafo Daniel Mordzinski. Ayer estuvimos charlando sobre este proyecto, que será acojonante y que cuenta una historia fascinante, combinando textos y fotografías. Pero no te avanzo nada. Ya tendremos ocasión de hablar sobre ese libro. Y verlo. Y olerlo. Y palparlo. Porque hay libros que entran por los cinco sentidos. Y éste lo será.

 

Es viernes. San viernes. Disfruta y sé feliz.

 

Fdo.- Jesús Lens, ojeroso, pero contento.