La noche 351

Este fin de semana lo dedicamos a los Premios Literarios Jaén de CajaGRANADA (Enlazamos la noticia de IDEAL Jaén sobre la entrega, ayer, de los premios y la Galería de Fotos de Francis J. Cano).


Comenzamos por la reseña del Premio de Poesía. Mañana reseñamos el Premio de Narrativa Juvenil. Y si, entretanto, escribimos algo… ¡pues también lo blogueamos, claro que sí!

Hay una secuencia entre lo poético, lo pesadillesco, lo onírico, lo evocador y lo terrible en la magistral película “Underground”, de Emir Kusturica: caen las bombas sobre la ciudad de Belgrado y quedan abiertas las jaulas de un zoológico. Un tigre escapa y vaga por las calles, vacías, humeantes, llenas de escombros.

La primera lectura, quizá demasiado rápida -pero imposible hacerlo de otra manera dado su brutal poder hipnótico- del poemario “La noche 351”, de Ángel Petisme, galardonado con el Premio Jaén de Poesía de CajaGRANADA, me hizo evocar secuencias como la descrita.

Y me trajo recuerdos de otras películas como “En territorio hostil” o “En el Valle de Elah”, por ejemplo.

¿Se puede hacer poesía con un AK47? ¿Se puede hacer poesía con balas, cascos, rapiña y destrucción?

Decir que “La noche 351” es un poemario que gustará a quiénes no estamos “acostumbrados” a leer poesía es injusto para los poetas y los amantes de la literatura en verso.

Pero puede ser una gran verdad.

Porque “La noche 351” contiene poemas, por supuesto, pero también citas y aforismos, pensamientos, narraciones y un íntimo diario de viajes escrito en prosa poética. Todo ello hace de “La noche 351” un libro total, que trasciende géneros y cuya única etiqueta es la de la calidad.

Un libro emocionante, de los que llegan al lector desde la primera cita, intensa, preclara, iluminadora, del rumano Mircea Eliade. Y que marca el camino a seguir con la segunda, de Mahmud Darwish: “La poesía nace en Iraq; sé iraquí, amigo, si quieres ser poeta”.

Es cierto. Pero no solo la poesía nació en Iraq. En las tierras de Mesopotamia, entre el Tigris y el Eúfrates, están los orígenes de la civilización, como hemos aprendido en los libros de historia. Y, desde hace años y años, esas tierras han sido sistemáticamente machacadas por guerras, conflictos y padecimientos sin fin, cuya culminación fue la invasión de las tropas norteamericanas para derrocar a Sadam Hussein.

¿Se puede hacer poesía con todo ello?

Sí. Ángel Petisme así lo demuestra. Se puede hacer poesía con los puestos de libros de la calle Mutanabbi, en uno de los más preciosos poemas del libro. Poesía puede ser el expolio del Museo Nacional, las lágrimas de una niña o la rabia de una madre. Y los sueños de libertad. Los anhelos de paz. La contradicción de la vuelta a casa. El tesoro que te espera. El descubrimiento del viaje.

Poesía es ir a recitar poemas a Bagdad en mitad de la guerra. Como hizo el autor de “La noche 351”, junto a otro grupo de felices insensatos que desafiaron la lógica y se plantaron en Iraq, armados únicamente con sus libros y sus palabras; sus sueños y sus sentimientos; sus metáforas y su capacidad de resistencia frente a la barbarie.

Quizá porque la poesía no sea lógica ni razonable y sí loca y desmesurada, como los buenos poetas.

Lean, lean “La noche 351”. Dos cosas puedo garantizar: que no te aburrirás y que no te dejará indiferente.

Eso sí: si te provoca insomnio, no me eches a mí la culpa.

Jesús Lens Espinosa de los Monteros.

Los pasados 3 de diciembre, de los últimos 3 años, decíamos esto: 2008, 2009 y 2010.

Marcas de la casa

Lo que vais a leer a continuación es extensivo a marcas y productos como Maritoñi, Piononos o, por supuesto, IDEAL y la  CajaGRANADA y su Obra Social. Y, sin duda, el Jamón de Trevélez y la Quisquilla de Motril. ¡Y el Ron de Motril, el Ron Pálido de Paco Montero Martín! A ver qué pensáis…

 

Entré en la consulta y el doctor, tras estudiar los análisis correspondientes, me miró y, muy serio, me recomendó tomar Puleva semidesnatada con Omega 3 ya que, además de ser sana y apropiada para lo mío, está muy buena.

“Es la que yo tomo en casa”, dijo sin el más mínimo rubor o disimulo.

Y me gustó esa actitud directa, clara, franca y sin ambages.

Es lo mismo que hacemos los amigos de La Banda cuando entramos en cualquier bar: tras acomodarnos en la barra, pedimos una Alhambra Especial que esté muy fría. O una Milno, de vez en cuando. De hecho, si en un bar no hay Alhambra, no solemos volver. Es una cuestión de principios.

En esta vida, cada vez más llena de incertidumbres y zozobras, solo tengo unas pocas certezas y entre las mundanas y comerciales, apunto tres a título de ejemplo, aunque podrían ser más y lector sabrá extrapolarlos: la leche, Puleva. La cerveza, Alhambra. El agua, Lanjarón.

Partamos del hecho de que las tres bebidas señaladas están francamente buenas, no en vano, son productos de altísima calidad. Pero es que también forman parte esencial de mi educación sentimental más íntima y sentida, habiéndome acompañado desde que tengo uso de razón en desayunos, farras y excursiones.

Además, por mucho que ahora estén encuadradas en grupos mayores o en grandes multinacionales, siguen siendo marcas granadinas que generan riqueza en nuestra provincia, dan empleo a nuestra gente y aportan necesarios e imprescindibles recursos a la átona y moribunda economía granadina.

Y, sobre todo, soy un firme consumidor de marcas granadinas de toda la vida porque también son las empresas que destinan parte de sus beneficios a financiar el deporte, el arte, el espectáculo y la cultura de nuestra tierra.

Sea por promoción, marketing y publicidad, sea por convencimiento y compromiso o, sencillamente, por creer en la cada vez más imprescindible y exigible responsabilidad social de las empresas, el caso es que los logotipos de Alhambra, Lanjarón y Puleva suelen estar en los carteles, camisetas, folletos, carpetas, vinilos y paneles de casi todos los eventos que se celebran en nuestra provincia.

De los equipos profesionales y los grandes estadios a las canteras y aficionados que juegan en los pequeños pabellones o en las pistas polideportivas descubiertas. De magnos y sesudos congresos a las alegres y coloristas fiestas populares. De los grandes festivales de música en los auditorios de la ciudad a las pequeñas obras de teatro de los aficionados en los escenarios de los barrios y los pueblos.

Que nadie quiera ver en esta defensa de las marcas de la casa ningún tipo de reduccionismo provinciano. Muy al contrario, el hecho de que las mismas se hayan incorporado a grupos más grandes, no solo les permite haberse garantizado su supervivencia y el mantenimiento de miles de puestos de trabajo en Granada y fuera de la provincia, sino que también favorece la comercialización de sus productos, de forma que cada vez es más habitual poder bebernos una Alhambra Especial en locales de Madrid o Barcelona. ¡Piensa en global, actúa en local!

Es verdad que ahora pasamos por momentos duros y complicados y que hay menos recursos para invertir, menos circulante para gastar y, en general, menos dinero en nuestras manos, en el de las empresas y las instituciones. Pero la solución no pasa por cabrearnos, darles la espalda y dejar de confiar en ellas. Al contrario. Cuanto más las apoyemos, más fácil será que superen la crisis y más pronto podrán colaborar a tirar del carro de nuestra economía. Efecto arrastre. Sigamos creyendo en las marcas de la casa, consumiéndolas y disfrutándolas. En ello nos va el futuro.

Jesús Lens Espinosa de los Monteros

¡Vuelve Indiana Jones!

¿O es un deseo? Con setenta tacos, Harrison Ford se considera a punto para volver a ponerse el sobrero y blandir el látigo del mítico aventurero. Pero, como si fuera uno de los jugadores de la NBA amenazados por el lock out, y aunque George Lucas esté escribiendo el nuevo guión de la película, que debería rodarse a final de 2012; dije que no saldrá barato

Hasta aquí, la información. Ahora la especulación: ¿A qué misterio se enfrentará Indi, tras el fiasco de la Calavera de Cristal? A mí me ponía mucho lo de buscar Excalibur. Lo de la Atlántida era ya muy fuerte.

 

A ti, ¿qué te gustaría que buscara Indi V, más allá de la dentadura postiza, en el vaso de agua de al lado de la mesita de noche?

 

Jesús indiano Lens