Buenas, soy Emilio Calatayud. Mientras espero a ver el partido de La Roja, me viene a la cabeza un reflexión: llevo ya unos meses de baja debido a mis múltiples goteras. Y echo de menos el juzgado. Son muchos años y cuesta desengancharse. Pero también me ha servido para darme cuenta de que hay vida fuera del trabajo. En un juzgado de Menores hay mucha vida, a veces demasiada, pero fuera también.
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