Buenas, soy Emilio Calatayud. El estado de Utah (Estados Unidos) ha dictado una ley que prohíbe a los menores de 18 años usar las redes sociales sin autorización de los padres y también permite violar la intimidad de los hijos (siempre hablamos de menores): las empresas responsables de las redes tendrán que facilitar una contraseña a los padres para que pueden ver lo que hacen los niños en ‘el Internet’.
Utah, además, impide a los menores que utilicen las redes sociales entre las diez y media de la noche y las seis y media de la mañana.
¿Censura? No, sentido común.
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