El Acelerador se juega en casa

Hace unos días se publicaba en IDEAL un artículo capital titulado “Acelerador: Granada no compite con Japón”, de Juan José Nievas Aranda, presidente de la Asociación de Ingenieros Industriales de Andalucía Oriental, en el que se explica el momento actual del proyecto IFMIF-Dones sobre el que tanto he escrito. Aquí , aquí y aquí, por ejemplo.

El artículo resulta imprescindible ya desde su preclaro e ilustrativo titular. De hecho, cuando en la ecuación apareció por primera vez el país del Sol Naciente, le preguntaba a Eduardo Ros, uno de los fundadores de la empresa Seven Solutions: “¿Y esto de Japón? No lo entiendo. En la carrera por el Acelerador estábamos Granada, Polonia y Croacia. Pero de Japón no habíamos oído una palabra… hasta ahora. ¿Qué pintan los japoneses en esto?”. (Sobre Seven Solutions y Eduardo Ros escribí aquí)

Y, claro, los japoneses pintan mucho. De hecho, lo mío no era tanto una pregunta cuanto un grito, una exclamación de terror: si de tecnología se trata, Polonia y Croacia podrían parecer rivales asequibles en cuartos y en semifinales, pero una final contra Japón se me antojaba tan complicado como un Alcoyano – Real Madrid, por mucha moral que le quisiéramos echar al partido.

Fue la ingeniera Pilar Gil, otra de las integrantes de esa Seven Solutions que tanto está haciendo por traer el IFMIF-Dones, quien me explicó el estado de la cuestión aceleradora durante la pausa para el café en el Workshop organizado por SHAPE Energy y Acento Comunicación del que les hablé AQUÍ. Por un lado tenemos a Japón, efectivamente, donde ya hay un acelerador-laboratorio en construcción, con independencia de la candidatura granadina.

Después está Grenoble, en Francia, con su Sincrotrón, una fuente de luz de tercera generación situada en centro de investigación multinacional que ya alberga un espectacular anillo de 844 metros de longitud donde se están realizando diferentes experimentos científicos. De hecho, sería en Grenoble donde se radicaría el gran acelerador de partículas.

¿Y Granada? ¿Qué papel desempeñaría en este tinglado? ¿En qué consiste el proyecto que deseamos que se implante en Escúzar? Aquí se construiría otro acelerador-laboratorio para probar los materiales que serán utilizados el gran acelerador. Y ahí es donde nos la jugamos: si no hay financiación europea, esta parte del proyecto será absorbida por Japón. Y aquí ya escribí lo que podíamos perder en el camino.

Jesús Lens

Europa en Granada

Llevo las últimas horas hablando en mi particular spanglish del Zaidín para tratar de hacerme entender con Lenke y Giulia, provenientes de Inglaterra e Italia, respectivamente.

La cosa era colaborar en un workshop organizado por Acento Comunicación en el marco del proyecto europeo SHAPE Energy del que les hablaba hace unos días, buscando tender puentes entre los sectores energético y científico y el de las humanidades.

Un workshop basado en las narrativas del storytelling que obliga a los participantes a practicar una escucha activa y a involucrarse personalmente en las sesiones de trabajo y que, por tanto, conlleva el riesgo de terminar en fracaso estrepitoso.

Sin embargo, colaborar con Lenke y Giulia, con Olga, Sonia, Javier, Bernal y Gustavo lo ha hecho todo tan fácil que ahora mismo me encuentro exultante. Y energéticamente sabio. Pero, sobre todo, disfruto de la sensación de pertenencia.

Sensación de pertenencia a un continente europeo cuya Unión nos parece tan lejana y distante, pero que está aquí, en nuestra tierra. En el proyecto IFMIF-Dones, sin ir más lejos, que trabaja en traer el Acelerador de Partículas a Escúzar.

Europa también es mostrar las bondades y las bellezas de Granada a Lenke y a Giulia. Y hablar con ellas de política, de cine y de viajes. Ha sido como hacer un Erasmus, pero de viejuno, sin moverme y comprimido en un par de días.

Hablando con Gustavo, comentamos la sensación de haber tenido a Europa en casa, precisamente en unos momentos en que Europa se rompe, entre el Brexit y el auge de los nacionalismos y los populismos. Cercanía, empatía, descubrimiento y conocimiento. Un trocito de la Universidad de Cambridge y un pedacito del Instituto Politécnico de Turín conviviendo en el Parque de las Ciencias con la Universidad de Granada, pero también con asociaciones vecinales de Almanjáyar, hablando de tú a tú de los retos de futuro de nuestra sociedad.

Hay jornadas de trabajo en las que todo cobra sentido, pensando en lo global desde lo más puramente local. Días en que la vida se convierte en un nuevo punto de partida.

Jesús Lens

Energía humanista

Tengo muchas ganas de escuchar esta mañana a Miguel Arias Cañete, comisario europeo de Acción por el Clima y Energía, en el desayuno informativo organizado por IDEAL en el hotel Santa Paula. ¿Qué nos contará sobre el futuro energético que nos espera?

La energía es una gran desconocida en nuestra vida, acostumbrados a darle al interruptor y que se encienda la luz. Solo somos conscientes de ella cuando encontramos su factura cargada en nuestra cuenta corriente… y cuando vuelve la luz después de un apagón, momento en que nos sentimos un poco como el Dios bíblico: “Sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas. Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un día”.

A la espera de conocer los datos definitivos del pasado año en el conjunto del sector, las compañías eléctricas ganaron la nada desdeñable cantidad de 5.463 millones de euros, en 2016. Sin embargo, la Zona Norte de Granada sufre apagones constantes y los pueblos del área metropolitana no dejan de padecer esos funestos microcortes de energía que pueden fundir un electrodoméstico con la facilidad con la que un niño apaga las velas de una tarta de cumpleaños.

El primer principio de la termodinámica reza una máxima convertida en aforismo: “La energía ni se crea ni se destruye, solo se transforma”. Sin embargo, los transformadores parecen funcionar mejor en un sentido que en otros y tratar de entender una factura de la luz es más difícil que comprender el famoso E=mc2 del relativista Albert Einstein.

De ahí que sea tan importante buscar el sesgo humanista y social al universo energético, basado casi exclusivamente en cifras y matemáticas. Puede parecer algo raro y extraño, pero hay otros horizontes. Échenle un vistazo al programa SHAPE Energy, sin ir más lejos. En sentido literal. Que Granada es una de las ciudades europeas involucradas en dicha iniciativa, a través de la agencia Acento Comunicación.

SHAPE Energy es una nueva plataforma europea para las ciencias sociales y las humanidades en materia de energía, un proyecto al que debemos prestar mucha atención: nada de lo humano debería resultarnos ajeno y no hay nada que haya hecho tanto por el desarrollo de la humanidad como la energía.

Jesús Lens