Salvajes

El peligro era que Oliver Stone, en un nuevo viaje lisérgico, hubiera filmado “Salvajes” con el mismo tono paródico, desmesurado y fallido que le dio a dos de sus películas más nefastas y lamentables: “Giro al infierno” y “Asesinos natos”, supuesta respuesta a la tarantinización del thriller contemporáneo.

 

Pero no.

Y mira que el momento en que se retransmite por streaming una amenaza de decapitación, usando para ello un siniestro vídeo juego nos hizo temer lo peor…

Pero no.

Es lo que tiene, afortunadamente, partir de un material tan jugoso como son las novelas de Don Winslow: no hace falta exagerar. Porque lo que cuenta Don es tan desmesurado, tan aberrante y tan brutal que no tiene parangón en la imaginación de cualquier cineasta. Aunque esté tan hecha pedazos como la de Stone.

Es lo que tiene, desgraciadamente, partir de un material tan doloroso como es la realidad del tráfico de estupefacientes y los cárteles de la droga en México. Cualquiera que haya leído la descomunal “El poder del perro”, de la que se decía la HBO iba a convertir en una de sus imprescindibles series, sabe de lo que hablo.

Pero “Salvajes”, a pesar del título, no es tan bruta. No es que le falte sangre, que conste. Y, desde luego, Benicio del Toro le da a su personaje las necesarias dosis de insania que precisa. Pero el tono, la fotografía, el mar y los personajes gringos la emparentan más con “El invierno de Frankie Machine” que, dirigida por Michael Mann, nos traerá a Robert de Niro en lo que debería ser uno de las grandes títulos de la década.

 

Pero centrémonos en esta “Savajes” que, quizá por las dudas que me suscitaba antes de entrar a verla, me dejó un inmejorable sabor de boca. Aunque la presentación del triángulo amoroso protagonista se me hizo algo lenta, la verdad es que funciona. Al igual que la entrada en escena, sucesiva, de esos secundarios de lujo: el mencionado Del Toro y el pasadísimo Travolta.

 

La que no me dice nada (y esto puede ser considerado una herejía) es la Madrina, esa Salma Hayek que no está a la altura de un personaje que requería de mucho más carácter y, posiblemente, de mucha menos belleza.

Me gusta el ritmo, me gusta la fotografía, me gusta la tela de araña que crean los guionistas, me gusta el Azul, el ambiente y la atmósfera de la película. Me va gustando todo… hasta llegar al final.

 

Al final, Oliver Stone tiene que hacer de las suyas, claro. No vamos a comentar el tema, en alta voz, para no reventar a nadie la “sorpresa”, pero lo podemos hablar en un privado. O tomando unas Alhambras fresquitas, haciendo eso que tanto nos gusta hacer: hablar de cine.

Jesús Lens

Y ahora, a ver qué blogueamos los 14 de octubre de 2008, 2009, 2010 y 2011

PD.- ¿Has visto que hemos puesto nueva encuesta en la Margen Derecha, además de renovar contenido? ¿Participas?

 

EL CINE CON AROMA, IDIOMA Y CAPITAL ESPAÑOL ARRASA EN CANNES

¡Triple premio para el cine español en Cannes! Bueno, es una forma de hablar, que Oliver Laxe es una rara avis de nuestro cine y, como leemos AQUÍ, se ha llevado el Premio de la Quincena de Realizadores. Y a Bardem le han reconocido su papel en «Biutiful», como podemos leer AQUÍ. Pero es que, además, ‘Uncle Boonmee’, del tailandés Apichatpong Weerasethakul, producida por el español Luis Miñarro, es la Palma de Oro de Cannes, una de las ediciones más sosas y mediocres de los últimos años, a decir de los profesionales de la crítica desplazados al Festival. Por cierto, Boyero puso a parir la película galardonada con el premio supremo del Festival… Leed AQUÍ su desopilante resumen: Una Palma de Oro grotesca.

 

Por cierto y sobre «Biutiful», se confirma que, sin su guionista de referencia, el bueno de Iñárritu no es tan bueno. Lo que, para quienes nos gusta la escritura, es importante. En pocas palabras, que como escuchamos AQUÍ, a Boyero le ha dejado frío «Biutiful». Menos mal que sí le gustó última de Woody Allen…  Y AQUÍ tenemos más Boyero en Cannes.

BOYERO EN CANNES

Vaya. Pues a Boyero tampoco le ha gustado lo último de Oliver Stone, «Wall Street 2» como dice AQUÍ. Pero le ha gustado una película … coreana!!!! Las vueltas que da la vida.

 

Muy sincero Carlos Boyero, cuando habla de Michael Moore, como AQUÍ, en su nuevo vídeo desde Cannes. (Más abajo, las críticas a Robin Hood) 

 

Del Chat con Carlos Boyero, desde Cannes:

 

Si miro los nombres de la mayoría de directores que tienen película en la Sección Oficial, noto algo cercano al escalofrío. Ojalá que mis contrastados prejuicios se evaporen. ‘Robin Hood’ me ha decepcionado, me ha aburrido un poquito, algo imperdonable con semejante tema. Acabo de ver un documental italiano titulado ‘Draquila’, dirigido por Sabina Guzzanti, la Michael Moore italiana, que es otro inquietante retrato sobre el impresentable Silvio Berlusconi, sobre su capacidad para hacer negocios y manipular a la gente después del terremoto que destrozó la ciudad de L’Aquila. Lo que más me apetece ver de toda la programación de Cannes, es lo último de Iñárritu, Woody Allen y la segunda parte de ‘Wall Street’ que ha dirigido Oliver Stone.

 

Ohhhhhhhhh… qué decepción 🙁

 

A Carlos Boyero, el nuevo Robin Hood, no termina de convencerle. Y sobre la programación de Cannes… pesimismo.

 

Ver AQUÍ.

 

¿Fiasco a la vista?
¿Fiasco a la vista?

Y digo bien ver porque… ¡han vuelto los vídeos de Carlos Boyero! Aunque si queréis leer su crítica sobre el prescindible Robin Hood, AQUÍ la tenemos.  

 

Menuda racha de decepciones, junto a ESTA y a las que os comentaré mañana. Estoy de un llorica…

 

Jesús Lens, la SuperNenaza.