Abierto por Cuarentena

Estos próximos días no tendré columna en IDEAL. Cambio de sección y, mientras el cuerpo aguante, voy a escribir una serie de reportajes titulados ‘Abiertos por coronavirus’.

Como estarán en la web del periódico todos los días y estos días está abierta para todo el público, suscriptor o no, iré enlazando en esta misma entrada cada uno de ellos.

Miércoles 18 de marzo. El pollo como valor refugio.

Jueves 19 de marzo. Una explosión de luz y color en nuestras calles.

Viernes 20 de marzo. Alimento para la mente y para el alma.

Sábado 21 de marzo. Frutas y verduras frescas y lujuriosas.

Domingo 22 de marzo. Hemos metido el templo en el salón de casa.

Lunes 23 de marzo: Farmacéuticas. Titanes de bata blanca.

Martes 24 de marzo: Combustible para los coches y para el cuerpo.

Miércoles 25 de marzo: El pescado más fresco, todos los días.

Jueves 26 de marzo: Las asesorías granadinas, a destajo.

Viernes 27 de marzo: Recargas de móvil, internet y optimismo.

Sábado 28 de marzo: Unas chuches para animarnos.

Domingo 29 de marzo: Infusiones frente a la crisis.

Lunes 30 de marzo: A nadie le amarga un dulce.

Martes 31 de marzo: Congelados para salir lo menos posible.

Miércoles 1 de abril: Estancos. Con cada bulo hay un repunte en la venta.

Jueves 2 de abril: Material educativo y artístico.

Viernes 3 de abril: Un viaje por Granada a través del sabor.

Sábado 4 de abril: Perretes transmisores de cariño.

Domingo 5 de abril: Adaptación activa al teletrabajo.

Lunes 6 de abril: Huevos, alimento de primera necesidad.

Martes 7 de abril: La compra a domicilio, por pequeña que sea.

Miércoles 8 de abril: Hornos y fogones encendidos.

Jueves 9 de abril: En contacto a través de los móviles.

Viernes 10 de abril: Entrega especial. Los gritos del Silencio.

Domingo 12 de abril: Muletas, férulas o sillas de ruedas para una urgencia.

Lunes 13 de abril: Endulzar el final de la Semana Santa.

Martes 14 de abril: Salir de casa para hacer la colada y lavar la ropa.

Miércoles 15 de abril: Sin enlace a los protésicos dentales.

Jueves 16 de abril: Sin viajeros ni turistas, el taxi está al ralentí.

Viernes 17 de abril: Pollos asados y otros platos cocinados cada día.

Sábado 18 de abril: La mejor comida japonesa, en casa.

Domingo 19 de abril: Compromiso y responsabilidad.

Jesús Lens

 

Compañeros de viaje

Entre canción y canción, a Loreena McKennitt le gusta contarle cosas al público. A través de su voz prodigiosa, te envuelve con sus palabras igual que con su música, embarcándote en un viaje espacio-temporal durante el que lo mismo despides a los elfos cuando se van a dormir en las brumosas montañas célticas que das palmas al calor de la hoguera en un alto de la ruta caravanera con la que estás atravesando Asia. (No dejen de leer aquí la prodigiosa crónica del concierto que hizo Juan Jesús García en el IDEAL de ayer)

Foto: Alfredo Aguilar

Pocas artistas tienen la capacidad de evocación de una Loreena McKennitt a la que el público granadino esperaba rendido de antemano y deseoso de revivir aquellos míticos conciertos de la Alhambra de hace ya tantos años, inmortalizados en un DVD cuyos poseedores atesoramos como oro en paño.

En una de sus alocuciones, tuvo palabras preciosas para toda la gente que la acompañaba en escena. Les alabó como los excelentes músicos que son, por supuesto, pero también como maravillosos compañeros de viaje. Y es que Loreena ha hecho del viaje y del descubrimiento de culturas una fuente de inspiración constante.

Nada más salir a escena recordó su paso por Granada, antes de ser una artista famosa, y reivindicó el papel de nuestra tierra como lugar de encuentro de culturas. Y habló de los árboles, de la importancia que deberían tener en nuestra vida. Curiosamente, el día anterior, la cantante Aurora Arteaga también desgranó un par de canciones inspiradas por los árboles en su concierto del Jazz en la Plaza del Centro Cultural Memoria de Andalucía, lleno hasta la bandera.

Loreena nos advirtió de los riesgos del falso progreso enfrentado a la naturaleza. Y nos encorajinó a recuperar los placeres sencillos de la vida, a la que conviene mirar de tú a tú, al natural, y no a través de una pantalla. Un mensaje que no aplicó, por ejemplo, al fulano del saquito a rayas que no dejó de enarbolar el móvil para grabar fragmentos de todas y cada una de las canciones, creyéndose un émulo de Almodóvar por hacer zooms con la pantalla táctil de su teléfono ¿inteligente?

Jesús Lens