El mito del eterno retorno retorno del jazz a Granada

El sábado publiqué este artículo, en IDEAL, sobre el recién terminado Festival de Jazz de Granada. Aquí viene felizmente ilustrado con las iPhotografías de mi Cuate Pepe, discretamente tomadas en diversos conciertos. A ver qué os parece: 

¿Cómo? ¿Qué ya se ha terminado? ¿Es posible? ¡Si apenas había comenzado! Y, sin embargo, Paquito D’Rivera y el quinteto Cimarrón echaron el pasado domingo el cierre a la edición del 2012 del Festival de Jazz de Granada, con un concierto de música clásica cubana que entusiasmó a un público entregado de antemano.

 

Menos mal que nos quedan los trasnoches. Y los clubes. Y las asociaciones. Y las bandas y orquestas. Pero esa es, felizmente, otra historia sobre la que volveremos pronto. Muy pronto.

Si por algo se ha caracterizado el Festival de Jazz de Granada, a lo largo de su ya larguísima trayectoria, es por haber permitido que los mejores músicos del mundo tocaran en la ciudad nazarí. La nómina de artistas que han pasado por los distintos escenarios de nuestra ciudad daría para escribir la más completa antología del mejor jazz de final del siglo XX y principios del XXI.

 

Y la edición de este año, a pesar de todos los pesares y de los brutales recortes realizados en Cultura, no ha sido una excepción. Menos conciertos, menos detalles para los abonados, más concentración. Pero la misma calidad. O mejor. Porque ha sido un privilegio, además de escuchar al saxofonista cubano, haber tenido la ocasión de rememorar el legado de Miles Davis gracias a esa banda que fue “Miles Smiles”, de seguir las huellas mestizas de Jorge Pardo o de extasiarnos con el potencial de la trompeta de Roy Hargrove y sus imposibles Adidas trajeadas pateando el patio de butacas de un Isabel la Católica abarrotado en cada concierto.

 

Pero si hubo dos joyas, dos diamantes, dos conciertos para el recuerdo en esta 33 edición del Festival de Jazz, fueron los protagonizados por el trío de Vijay Iyer y el dúo conformado por Omar Sosa y Paolo Fresu.

No fue fácil el concierto del pianista norteamericano de ascendencia tamil. Aunque comenzó de forma abrasadora con uno de los temas de su último trabajo, “Accelerando”, pronto se deslizó por paisajes sonoros más sosegados, técnicamente complejísimos y sin una concesión o alarde que enardeciera al público. ¡Y mira que podía, como demostró en la arrolladora segunda parte de un concierto impecablemente engarzado, con versión del “Human nature” de Michael Jackson incluida!

 

Y nos quedan Sosa y Fresu. O Fresu y Sosa. Lo suyo sí fue un alarde y un prodigio, de principio a fin. Una actuación musical que también fue una interpretación teatral, casi una ceremonia en la que desnudaron esa “Alma” que da nombre al disco que presentaron en directo. Ética y estética musical en las que el minimalismo más despojado convive, a la perfección, con la exuberancia gestual de dos auténticos monstruos cuyos escorzos y paseos por el escenario desembocaron en una aclamada comunión con el público cuando bajaron a la platea y saludaron al respetable que, entregado, les regaló una de esas ovaciones que conmueven al Teatro Isabel la Católica.

Gracias a la Oficina Técnica del Festival de Jazz, a las instituciones y empresas y a los técnicos de luces y sonido y personal de sala que han hecho posible, un año más, que el milagro se haya producido.

 

Jesús Lens

Ahora, veamos los 25 de noviembre de 2008, 2009, 2010 y 2011

Festival de Jazz de Granada 2012

Cuando estuvimos en Nueva York, hace unos meses, nos hinchamos a escuchar jazz en algunas de sus míticas salas, del Standard Jazz al Blue Note, pasando por el Birdland. Tal y como contamos aquí, disfrutamos todo lo que se puede disfrutar. Y más. Sin olvidar el jazz en Harlem.

Pero como el ser humano es insaciable y, además, ansioso a más no poder, me quedó una cierta frustración cuando ví que en una de esas salas, a la semana siguiente de irnos, tocaba el trío de Vijay Iyer, el que para mí es el pianista del momento. (Atentos a este enlace, hablando de su compromiso creativo)

En esa joya por satélite que es el Canal Mezzo pillé a principios de año uno de sus conciertos y, durante meses, fue mi música recurrente, hasta que me cambié al African Sound. ¡Pedazo de concierto, con momentos de una exhuberancia majestuosa pespunteados por otros, minimalistas total!

La prueba de fuego: el disco. “Accelerando”, se llama. Comprado y… ¡¡¡¡Oh, sí!!!! Un disco prodigioso, lleno de matices. Solo ver la portada, entre el rojo rabioso y el blanco inmaculado, ya da una muestra de cómo es Iyer.

A lo largo del año, a este monumental pianista le han galardonado con algunos premios: Mejor Artista, Mejor Álbum, Mejor Grupo, Mejor Pianista y Mejor Compositor.

¡Toma ya!

Antes del Festival de Jazz en la Costa, como el que le pide algo a los Reyes Magos, le decía a Jesús Villalba que sería una pasada tener aquí a este monstruo.

Y, ¿sabéis? ¡Los Reyes Magos existen!

Porque este noviembre, Vijay Iyer estará tocando en el Festival de Jazz de Granada.

¿Qué os ha parecido esa versión del “Human Nature” de Michael Jackson?

Yo creo que podría escucharla diez veces seguidas. Sin cansarme.

Pero es que, además, este mes de noviembre tendremos a Omar Sosa, tal y como anticipamos hace unos días. Y viene en este maravilloso formato. ¡Flipad, con el homenaje a “Graceland”!

Pero eso no es todo. ¡Aun hay más!

¿Quién el saxofonista más caliente del latin jazz mundial? ¿Quién incendia todos los escenarios por los que pasa?

¡Paquito D’Rivera!

Pero… ¡es que la cosa sigue! Mirad AQUÍ el Programa Central. Las entradas y abonos, desde el 10 de octubre.

Van a volar. Así que, no os lo penséis.

Gracias, a la Diputación de Granada por seguir apostando por el mejor jazz del mundo. Gracias a Mariche y Jesús, de la Oficina Técnica de Jazz. ¡Sois los mejores!

Y gracias a los patrocinadores, mi CajaGRANADA y “mis” Cervezas Alhambra. ¿Qué sería de la cultura en Granada, sin ellas?

Jesús emocionado Lens

Ahora, a ver qué blogueamos los pasados 9 de octubre: 2008, 2009, 2010 y 2011.

Omar Sosa vuelve al Festival de Jazz de Granada

¡Colosal! Uno de los pianistas más versátiles, especiales, espaciales y sorprendentes del mundo vuelve a tocar en Granada, en el Festival de Jazz del 2012. Y lo hace en este formato:

Bonito, ¿verdad? Como dice nuestra querida Mariche, Alma Mater del Festival, junto a Jesús Villalba: «llena de belleza, lirismo, paz, elegancia, optimismo y esperanza; lo que necesitamos en estos tiempos tan convulsos de crisis y lamentaciones».

¡Qué razón tienes, Mariche!

Gracias al Festival de Jazz de Granada por seguir en la brecha y traernos momentos sublimes como este. No puedo imaginar el trabajo que estará costando montar un Festival digno, con los recortes y las crisis. ¡Ánimo! Estamos con vosotros y ardemos por comprar los abonos, tan pronto se pongan a la venta.

Porque llega el otoño y el otoño, en Granada, huele a jazz. Un otoño que viene presidido, esperamos, por este homenaje a Graceland, de Paul Simon. ¡BRUTAL!

Jesús jazzeando Lens

¿Y los 22 de septiembre de 2008, 2009, 2010 y 2011?