5 MA: Dignos de admiración

Mucho, demasiado tiempo, el que hemos dejado pasar Edu y yo para juntarnos y charlar. Aunque de ese tema del juntarse hablaremos más pronto que tarde, ahora quiero hacer referencia a un tema que surgió en nuestra larga, fructífera y gratificante conversación.

¿Por qué no es Amancio Ortega un tipo conocido y reconocido en este país?

Eduardo, además de ser catedrático en la Universidad de Granada, creó hace unos años una empresa, Seven Solutions, con un grupo de compañeros de la Facultad, en un intento de llevar a la práctica muchas de las cosas que estudian a nivel puramente teórico y abstracto. Y, aunque han recibido premios y reconocimientos de lo más variado a lo largo de este tiempo, ahí siguen braceando, en mitad de la tormenta.

Una de las cosas que comentamos es que los empresarios siguen teniendo mala prensa y, en nuestra sociedad, la empresa todavía es vista como algo ominoso y amenazante. Y surgió el tema de Amancio Ortega.

¿Quiénes son los tipos más admirados en España? Seguramente, futbolistas y cantantes. Seguramente, igual que en el resto del mundo.

Y de aquella charla, este Post: ¿a qué españoles admiras más?

Vamos a hacer un ejercicio, a ver qué nos sale: elige a los 5 españoles vivos y en activo que más admires. ¿Vale?

Yo voy a hacer mi lista, tocando palos diversos.

Empecemos por el deporte. Empecemos por Guardiola. Que tuvo en momento en que empezó a parecer una caricatura de sí mismo, pero se ha reformado y está otra vez en ese tono discreto que le caracteriza, ganándolo todo, sin dar un ruido. Y, además, preparando su transición al fútbol inglés, sin encastillamientos ni miedos por la aventura exterior.

Sigamos por Eduardo Punset. Al que sigo desde tiempos inmemoriales. De cuando terminó la aventura del CDS y montó su efímero Foro. Ahora me encanta su programa, compro la revista “Redes” y leo todo lo que cae en mis manos de él.

Continuemos por Álex de la Iglesia, que habrá hecho cosas bien, regular y mal, pero que no deja un charco sin pisar, lo que en estos tiempos de corrección política y de falta de compromiso, se agradece un montón.

Admiro a Amancio Ortega. En aquel Máster que hicimos del Instituto de Empresa nos pusieron el caso de Zara como modelo y… ¡menudo modelo! Impresionante, lo que ha sido capaz de montar… y mantener y hacer crecer, siempre desde la discreción.

Y me queda un quinto hombre. Un quinto elemento. ¿Pau Gasol, el mejor, jugando y ganando en el mejor equipo del mundo? ¿Antonio Banderas, que triunfó en la Meca del cine, pero mantiene proyectos en nuestra tierra? ¿Chano Domínguez y su fichaje por Blue Note?

No.

Vamos a no repetirnos y a mostrar admiración por Pedro Duque, el astronauta. ¿Hay que explicar por qué?

No sé qué os parecerá mi selección, pero ardo por leer vuestros MA5: “Five Most Admired”

Jesús Lens.

EL MERCADO DE TRABAJO ANDALUZ

La columna de hoy de IDEAL, que debería provocar polémica. Aunque es julio, hace calor, es viernes y, supongo, no tenemos las neuronas para ruidos…

 

Demoledor, el informe presentado por ESECA, la Sociedad de Estudios Económicos de Andalucía, acerca de las cifras del empleo en nuestra tierra. Desde luego, los primeros resultados del recién nacido Observatorio del Mercado de Trabajo Andaluz son como para echarse a temblar: en un año de crisis se han perdido todos los puestos de trabajo creados durante diez años de crecimiento económico, con un incremento del desempleo, en 2008, de nada menos que el 45%. Ahí es nada. Pero es que, en Granada, el incremento del número de parados se cifra en el 70%.

 

Coincide la publicación de estos datos con la presentación, en loor de multitudes, de Cristiano Ronaldo en el Bernabeu, que se llenó hasta la bandera para ver… nadie sabe qué, en realidad. A un tipo recién llegado que enseñó su palmito, dijo tres banalidades y se marchó por donde había venido. Conste que me parece muy bien lo que está haciendo Florentino y que, en vez de escandalizarme con el meneo que le ha pegado al mercado de los fichajes, alabo su visión estratégica. Precisamente, lo de la presentación de Kaká y Ronaldo, siendo bochornoso, avala la visión florentiniana, entre lo deportivo y lo mercantil.

 

¡Oh! ¡Es él!
¡Oh! ¡Es él!

España se asoma al abismo de los cinco millones de parados, pero las exequias de Michael Jackson vienen copando titulares desde hace dos semanas y, en reventa, se pagan miles de euros por una entrada para ver a José Tomás. Así, aprovechando que tenemos puesta nuestra atención en los temas siempre: el fútbol, los toros y los entierros, la patronal exige no sólo subvenciones gubernamentales a tutiplén y que los bancos les refinancien sin garantías sus operaciones más arriesgadas sino, también y sobre todo, una mayor flexibilidad del mercado de trabajo.

 

Es curioso. En un año se han perdido tantos empleos como se crearon en diez y, para salir de la crisis, la patronal pide más despidos. Una crisis, no lo olvidemos, que en nuestro país ha sido provocada por el brutal sobreendeudamiento que sostenía el ladrillo que, a su vez, fomentaba una falsa sensación de riqueza generalizada. Un sobreendeudamiento, también, que financiaba la interminable fiesta perpetua en que creíamos vivir.

 ¿No piensas que últimamente hay mucho fúltbol en la tele, darling?

Términos como competitividad, inversión productiva, investigación, desarrollo, modernización o innovación quedaban para los analistas más sesudos y para los discursos de algunas personalidades con visión de futuro, pero la realidad es que, durante los años de crecimiento, hemos ido por la pasta gansa, pura y dura.

 ¿Dónde están? ¿Alguien las ha visto?

Ahora, cuando miles de jóvenes cambiaron las aulas por el andamio y la hostelería, nos encontramos con que la tasa de temporalidad del empleo andaluz está en el 40% y con que el 80% de la población andaluza trabaja por cuenta ajena. Un panorama francamente desalentador, de cara al famoso y posmoderno cambio de modelo económico y productivo que se exige para el futuro inmediato. Menos mal que la patronal sigue aportando brillantes ideas y que, por fin, Cristiano Ronaldo ha podido cumplir el sueño que tenía desde que era un niño: jugar en el Real Madrid. ¡Y usted que lo vea!

 

Jesús Lens Espinosa de los Monteros.