Lo que no rula

Es muy divertido reírse de la falta de gobierno e ironizar sobre lo bien que va la cosa con un gobierno en funciones que, en vez de gobernar, vegeta. Es un argumento muy de librepensador, destroyer y guay total, supuestamente molón y muy original. El único problema es que es más falso que una moneda de 5 euros.

Lo podíamos leer en el IDEAL de hace un par de días, gracias al repaso que Javier Morales hacía a cinco proyectos básicos para la socioeconomía granadina que están pendientes de ejecución y a la espera de la consignación presupuestaria que los ponga en marcha. Del acelerador de partículas a la variante de Loja, la circunvalación, los espigones de la Costa Tropical y las muy sangrantes conducciones de Rules.

Coincidió esta información con otra igualmente preocupante: tras un 2018 de récord, la producción de mango de nuestra Costa Tropical puede caer este año un 40%, en parte, por culpa de la sequía.

Sequía. Agua de riego. Canalizaciones inexistentes. La piscina más grande de Europa. Hacer surf en el pantano. Mangos. Aguacates. Costa Tropical. Riqueza. Pobreza. Desigualdad. Campos de golf. Málaga. Acuíferos. Calentamiento global. Cambio climático.

No. No me he olvidado de escribir. Es sólo que estoy seguro de que ustedes serán capaces de rellenar los huecos hasta completar un doloroso relato sobre el fracaso de nuestros representantes públicos, los de todos los partidos elegidos para defender los intereses de Granada y los granadinos en Madrid.

Así las cosas, no es de extrañar que los agricultores de la Costa Tropical hayan decidido hacer ‘vigilia’ en la presa de Rules para reclamar las imprescindibles canalizaciones que lleven el agua a sus fértiles y sedientas tierras de cultivo. Es un tema recurrente en esta columna. Granada ocupa los puestos de cola en todas las clasificaciones económicas que podamos consultar. Resulta dramático e ignominioso que, por culpa de la desidia de los sucesivos gobiernos de PP y PSOE, las canalizaciones de Rules sigan siendo una mera entelequia. Un proyecto fallido. Un sueño sin cumplir… de tintes pesadillescos, abstrusos y kafkianos.

Jesús Lens

Agua va, pero no viene

Junto al oro negro y al oro líquido, el oro del siglo XXI es verde y se acuña en forma de aguacate. Como ustedes bien saben, nuestra Costa Tropical es uno de los grandes yacimientos de aguacates del mundo, una auténtica mina a cielo abierto que produce uno de los productos más demandados por el mercado. Todo es bueno en el aguacate: fuente de energía y nutrientes, cardiosaludable, rico en fibra, bajo en colesterol… una auténtica joya recomendada por dietistas y nutricionistas.

Después de grandes subidas en el precio del aguacate, la enorme producción de países exportadores como Perú o México ha hecho que se estabilice. Pero su valor sigue siendo incalculable. Tanto que, como siempre ocurre con la fiebre del oro, despierta la codicia y saca lo peor de los seres humanos más ruines. De ahí que el robo de aguacates sea un delito al alza en Almuñécar y alrededores. (Lo escribí en esta columna de hace unos meses)

¿Saben ustedes, sin embargo, cuál es el peor expolio que están sufriendo los agricultores de nuestra Costa Tropical? El perpetrado un puñado de kilómetros más arriba, a la altura de la Presa de Rules, que sigue sin canalizaciones, convertida en un esperpento, en un descomunal monumento a la dejadez y a la inoperancia de los políticos granadinos.

Estos días ha vuelto a haber bronca, tras el runrún de que la nueva Junta de Andalucía está preparando un trasvase de aguas entre Rules y Almería. ¿Se imaginan? Años y años sin canalizaciones para que el gobierno conformado por PP, Cs y Vox haga por fin las tuberías… que se lleve el agua a otra parte.

¡Para mear y no echar gota, por abundar en los símiles líquidos y representar gráficamente otro doloroso obstruccionismo canalizador!

¿Hasta cuándo vamos a aguantar este ninguneo? El agua es un recurso económico vital y en Granada la estamos desperdiciando a manos llenas. Aunque la consejera de Agricultura ha señalado que no hay nada previsto en relación al trasvase fantasma, es posible que estemos ante la gota que colme el vaso de la paciencia de los agricultores de la Costa Tropical. Un tema del que he escrito tantas veces en este espacio… Aquí, por ejemplo. O aquí: El agua presa de Rules.

De cara a las elecciones generales, junto al tema del acelerador de partículas, hay que estar muy pendientes a qué proponen los partidos sobre las canalizaciones de Rules.

Jesús Lens