Hola, soy Morán. No por esperado es menos dramático: impresiona la gran cantidad de gente que está teniendo graves problemas de convivencia con sus hijos adolescentes. Algunos de esos padres se están dirigiendo a este blog para pedir consejo a don Emilio. No hay varitas mágicas. Cada semana, asisto como espectador a juicios por agresiones de hijos a padres, algunas de ellas, espeluznantes. El fenómeno afecta a todas las clases sociales. Incluso yo diría que se ceba especialmente con las familias que tienen un nivel medio, medio-alto. Si escarbas un poco, te das cuenta de que hay miles de afectados. Es una verdadera epidemia. Lo difícil es encontrar a alguien que no sepa de algún familiar o amigo que esté pasando por este calvario. En mi círculo, conozco tres casos.
El otro día escribió en este mismo blog una experta suiza que trabaja con estas familias en Suiza. Lleva ¡15! años en la brecha. Está pasando en toda Europa y empezó antes que en España. Es tremendo. Las autoridades deberían tomar nota y empezar a organizarse antes de que el tema vaya a más aquí. Que copien lo que se está haciendo en Suiza si hace falta. Hacen falta mediadores, una especie de ‘padres de emergencia’, que ayuden a los ‘titulares’ a desenredar la madeja, a aprender a poner límites a los hijos tiranos.
Seguro que todos pensamos a ‘mí no ve va a ocurrir’, pero está pasando. Y sería bueno tener a quién recurrir cuando suceda. No estoy hablando de los jueces de Menores: que ya están ahí, luchando en la línea del frente contra la epidemia. Ellos actúan cuando hay denuncias de por medio, pero sería bueno tener herramientas para no llegar a ese punto tan doloroso.
En fin… un saludo a todos.







Deja un comentario