CARTA ABIERTA A LA NOVIA DE TWISTER

Estimada y desconocida amiga:

Me tomo la osadía de escribirte esta carta abierta porque, desde hace unos meses vengo manteniendo una correspondencia bloguero-virtual con Twister, una persona a la que no conozco, pero a la que ya aprecio como si fuésemos amigos de toda la vida.

Twister, además de mantener permanentemente actualizada una extraordinaria Cartelera, personal, propia y con criterio; me ha ayudado un montón con esta mi Bitácora así que, cinéfilo empedernido como soy y adicto a los Blogs, puedes comprender el afecto que le he tomado.


Pero es que, además, Twister apunta alguno de los libros que recomiendo… y los compra. Para regalártelos. Pensarás que flipo si te digo que ese detalle me provoca sensaciones imposibles de describir con palabras. No sé que te han parecido «El niño con el pijama a rayas» o la novela popularmente conocida como del chino: «Muerte de una heroína roja». Si te gustaron, dale un besazo a Twister. Si te aburrieron, échale la culpa al capullo éste que las lee, las reseña y las recomienda 😉

Pero, querida amiga (permíteme la confianza) estas notas, lo que realmente buscan, es que me permitas darte una recomendación, consejo o sugerencia. Si tienes que hacerle un regalo a nuestro Twister, adicto como es a las pantallas, ¿que tal si le sorprendemos con… un libro?


«Cinema now», de Andrew Bailey, con la edición de Paul Duncan y publicado por Taschen es un libro de cine muy visual, pero que tiene una particularidad: habla de fenómenos como Internet, los Blogs, el cine en casa, la globalización y el descubrimiento de nuevos directores en el concierto fílmico internacional. Lo que no es fácil.

Un libro con poco texto, pero preciso. Bellísimamente ilustrado con fotogramas de muchas de esas películas raras que tanto le gustan a Twister, orientales, chinas y coreanas incluidas. Un libro que lleva en la portada a Pe(que) Cruz, pero sólo para despistar. Un libro imprescindible para saber por dónde se mueve el cine más radicalmente moderno y vanguardista que, sinceramente, pienso que puede gustar a nuestro gran amigo Twister.

Termino ya.

Ruego que, de nuevo, disculpes mi osadía, querida amiga. Cuida bien a este nuestro amigo Twister, que se nota a la legua que merece muy mucho la pena.

Un lejano pero cálido saludo de Patón-Lens.

CAMBIO DE IMAGEN DE CARA AL DEBATE DEL LUNES

Jokin, además de saberlo todo sobre novela negra (y cuando digo todo, quiero decir TODO), está metido en el meollo de la campaña electoral.
Parece que las cúpulas de los partidos han pensado que, de cara al debate del lunes, y dado que con sus insultos, agravios, afrentas y cadáveres, los dos candidatos ya han conseguido fidelizar los votos de sus fieles; van a cambiar de estética con el fin de conectar con la juventud, a la que consideran esencial de cara a la consecución de una victoria electora que cada vez sienten más lejana.

Y han presentado, en público, los nuevos uniformes, arreglados, pero informales, con que piensan cerrar la campaña:

RAJOY Y LA NIÑA

Todos lo hemos puesto a parir, pero todos hablamos de ello. La niña de Rajoy ya es famosa y hasta ZP alude a ella en sus mítines.

¿Será ella? ¿Será la niña?

Así la cosa: ¿estamos seguros de que fue un error aquel final de discurso tan cursi, empalagoso y almibarado?

Porque del cinéfilo «Buenas noches y buena suerte» de ZP no habla nadie.

En pocas palabras, Rajoy y su niña se han hecho famosos y, a buen seguro, los estrategas del próximo cara a cara entre los candidatos a Presidente de Gobierno están preparando sus movimientos en torno a la joía niña.

Para mí que, después de todo, la niña va a tener mucho que decir en todo este tinglado y Sola (parace que es el inventor de la idea) se va a coronar definitivamente como el verdadero gurú de las campañas electorales.

A ver. Mójense: ¿Cuántas alusiones piensan que harán ZP y Rajoy a la Niña en su debate del lunes?

¡¡¡A jugaaaaa!!!