La vida de un niño africano vale mil o dos mil euros, pero se puede pagar a plazos, ¡qué vergüenza!

 

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Buenas, soy Emilio Calatayud. Hablo mucho con los niños patera. También me enfado con ellos y les riño, porque cuando nos los traen a los juzgados de Menores es porque han cometido alguna infracción penal.  Pero, sobre todo, converso con ellos y les escucho. Y si tengo que encerrarlos, pues los encierro. Pero les escucho. Así me he enterado de que el pasaje para venir a España en patera cuesta entre mil y dos mil euros, pero se puede pagar a plazos. Los que trafican con estas criaturas son ‘comprensivos’ y dan ‘facilidades’. Los padres pagan poco a poco, pero si la barca se hunde no hay libro de reclamaciones. Te quedas sin hijo y sin dinero. ¡Qué vergüenza para los gobiernos de España (los de antes y el de ahora) y para la Unión Europea! Y para la ONU,  ¿para qué sirven la ONU y los gobiernos si no son capaces acabar con este desastre? Y que esto no es de ahora, que lleva pasando años. ¿Para qué sirven la ONU, la UE y los gobiernos si no son capaces de apartar a los tiranos que permiten que los traficantes de personas pongan precio a la vida de los niños africanos: mil o dos mil euros?. Eso sí, se puede pagar a plazos.

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