Desarrollo, esperanza y distopía

Antes de Navidad tuve la ocasión de participar en dos encuentros, a caballo entre lo presencial y lo virtual, que aparentemente no tenían nada que ver entre sí. El primero fue en la ETS de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos, donde le pusimos el punto final al proyecto ‘Los ODS, de cine’. Fueron varias sesiones en las que, antes de la pandemia, utilizábamos secuencias de películas para contextualizar y debatir con diferentes especialistas sobre cada uno de los 17 objetivos de desarrollo sostenible auspiciados por la ONU.

La jornada de clausura comenzó con la proyección de un apasionante documental realizado por Acento Comunicación: ‘Los ODS: mosquitos, colibríes y un carro de combate’, que tienen a su disposición en YouTube a través de este enlace. Continuó con dos horas de debate y reflexión sobre los retos a los que se enfrentan los países emergentes y en vías de desarrollo, como el hambre y la pobreza, el acceso al agua, los movimientos migratorios, las epidemias y enfermedades, las secuelas del cambio climático y la destrucción del medio ambiente, la falta de horizontes vitales y laborales, etc.

Un par de días después participé en una conferencia-taller impartida por Alejandro Pedregosa titulada ‘Distopía y novela: la invención del futuro hostil’.  Tras hacer un repaso histórico por las anti-utopías más famosas de la literatura, Pedregosa nos propuso un ejercicio práctico: que cada uno de los participantes en el taller desarrollara un argumento para un cuento o novela de carácter distópico.

Como no podía ser de otra manera, muchos de esos hilos argumentales y bocetos de narración hablaban de nuestros miedos y temores más íntimos. Por ejemplo, a los futuros conflictos generados por el acceso al agua, la imposibilidad del libre movimiento de personas, los problemas que traerán el cambio climático y la destrucción del medio ambiente, la precarización del mercado laboral, etc.

Resulta paradigmático y revelador que la proyección de nuestros miedos y temores futuros, nuestras hipotéticas distopías por venir; sean la realidad y el día a día de millones de personas que viven inmersas en ellas, aquí y ahora.

Colas en Banco de Alimentos

¿Quién se acuerda, en los tiempos del coronavirus, de una enfermedad como la malaria que, erradicada en los países del primer mundo, sigue matando a más de 500.000 personas al año? O el hambre y la malnutrición, que nos alarma realmente cuando vemos el auge de usuarios en los Bancos de Alimentos de nuestro entorno. Y así todo.

Jesús Lens

Mil días sin ti

Mil días. 1.000. Mil días sin ti, querido y añorado ferrocarril. Tren de mis amores y mis entretelas, ¿cómo hemos podido sobrevivir estos tres años en tu ausencia? ¡Pues gracias a ALSA, hombre ya, a ver si nos dejamos de tanto ripio y floripondio!

Hoy, cuando se cumplen mil días sin tren, creo que es justo y necesario alabar el compromiso de ALSA con nuestra tierra: si no fuera por sus autobuses, estaríamos total y completamente aislados, que la vía aérea para entrar y salir de Granada funciona tarde, mal y, en ocasiones, nunca. Que le pregunten a Pedro Sánchez, si no, cuando se quedó tirado en Madrid por una avería del avión de turno, sin poder venir a nuestra ciudad.

Para un cinéfilo compulsivo como yo, el tren es el medio de transporte más hermoso y evocador del mundo. Nunca olvidaré uno de los tests de calidad que mi padre les hacía pasar a los grandes directores de la historia del cine: si filmaban con nervio y con brío una secuencia protagonizada por un tren, eran buenos. Si no pasaban la prueba del algodón, eran malos. Y si nunca habían filmado un ferrocarril, es que ni eran directores ni eran nada.

Mil días añorando el tren, en Granada. El AVE, por supuesto. Pero también el otro. El de siempre. El que, sin prisas, pero con pausas, te permitía llegar a una ciudad tan maravillosa como Ronda, por ejemplo.

Mil días sin tren nos hacen recordar que el otro medio de transporte colectivo por carretera, el autobús, también existe. Quizá sea menos cinematográfico, pero es muy literario. Que se lo pregunten a Jack Kerouac y su mítica “On the road”: ¿qué habría sido de Sal Paradise y Dean Moriarty sin la mítica Greyhound, por ejemplo?

¡Ah, la Greyhound y la silueta del galgo, corriendo a toda velocidad, que tanto me recuerda a aquellos folios de nuestra infancia en los que escribía mis primeros cuentos, emborronaba dibujos de cowboys que fumaban en pipa y trazaba precarios planes de fuga, utilizando la imaginación como medio de transporte!

Mil días sin tren que yo quiero aprovechar para agradecer a ALSA que siempre esté ahí, llevándonos a Madrid y a Sevilla, al aeropuerto de Málaga, a Carchuna y al corazón de la Alpujarra. Alimentando, además, nuestra sed de historias, ¿verdad Alejandro Pedregosa? ¡Feliz tránsito!

Jesús Lens

Conversación con Fernando Marías

En Granada Noir sabemos que esto de los Encuentros Especiales con gente de la cultura negra y criminal es una anomalía que va contra el signo de los tiempos. Porque, de lo que se trata, es de hablar. Largo y tendido. De conversar. Para aprender, descubrir y disfrutar.

En estos tiempos de inmediatez y dispersión, de fugacidad, prisa y culto a la velocidad; retransmitir a través de Facebook una conversación de una hora de duración entre dos personas puede parecer una osadía, una temeridad. Casi una provocación.

 

Pero es lo que nos gusta hacer en Granada Noir. Cosas originales, diferentes y a contracorriente. Organizando presentaciones de escritores y dibujantes en bares de Granada, por ejemplo. Que la cultura, acodada a la barra de un garito que se precie de ser especial, llega.

 

O combinar disciplinas. Que el cine, la fotografía, el cómic, la literatura, la música, el teatro y la gastronomía, mezclados -y agitados- en sus justas proporciones, pueden ofrecer cócteles de lo más sorprendente, sabroso y atractivo.

 

De esta filosofía nacen los Encuentros Especiales que, con Cervezas Alhambra, venimos organizando a lo largo de todo el año. Fernando Marías es el cuarto invitado. Vean en YouTube las conversaciones con Alejandro Pedregosa en el kiosco Las Titas, con Enrique Bonet en el Mesós San Cayetano de Cgurriana de la Vega y con Carlos Salem en el Caradura Bistrot de Álvaro Arriaga; a ver qué les parece ese homenaje a la palabra que hacemos en cada charla.

 

Y hoy, a las 18 horas, abran la página de Facebook de Granada Noir. Ahí estaremos Fernando Marías y un servidor, en el hotel Alhambra Palace, prestos y dispuestos a hablar de literatura. Haremos un repaso por la obra de un autor que, entre otros premios, atesora el Primavera, el Biblioteca Breve y el Nadal. ¡Ahí es nada!

 

Charlaremos de sus múltiples proyectos, que Fernando es una de las personas clave de la cultura española contemporánea, polifacética e incansable y, por supuesto, será inevitable que hablemos de cine. La pregunta es: ¿cuánto tardará en surgir “Grupo salvaje” en la conversación? Se admiten apuestas…

 

Hoy lunes volveremos a practicar el arte de la conversación, una disciplina cada vez más en desuso. Y lo haremos a través de esas fascinantes tecnologías de la comunicación que, bien usadas, nos abren posibilidades infinitas.

 

La conversación con Carlos Salem, en el Caradura bistrot, tuvo más de tres mil conexiones. ¡3000! ¿Y si, en realidad, el gusto por hablar no estuviera tan pasado de moda?

 

Jesús Lens

Pisándose, cine y libros

Hoy voy a ejercer de malafollá. Otra vez. Y mira que lo siento, pero no me queda otra. Porque el pasado viernes, mientras veía una de las películas mudas programadas por el estupendo festival Granada Paradiso, Ángeles Mora daba el pregón de la Feria del Libro.

Y el sábado, mientras escuchaba a Alejandro Pedregosa, Juan Mata o José María Pérez Zúñiga, que presentaba su novela “Cine Aliatar”, no podía ver el desenlace de la trilogía erótica del cineasta alemán George Wilhelm Pabst.

 

Y lo más curioso del tema es que el Ayuntamiento de Granada es el principal impulsor de dos iniciativas culturales que se pisan entre sí. -Vaya por Dios, hombre. Ya está el Lens quejándose- podrán pensar ustedes.- Cuando no hay, porque falta. Y cuando hay, porque sobra.

 

Pues sí. Me quejo. Porque tengo el defecto de que me gustan igual el cine que los libros. Y me parece un error garrafal hacer coincidir en las mismas fechas dos de las propuestas culturales de más enjundia de esta ciudad. Y si a ello le añadimos los más de cien conciertos programados en el mismo fin de semana. ¿Será por semanas a lo largo del año?

Que sí. Que podemos echarle la culpa a la Semana Santa, que este año ha caído muy tarde. Pero que me da a mí que esta desmesurada concentración de actividad en las mismas semanas tiene más que ver con el cargante Bonitiquismo que nos invade. Que alguien ha decidido que no puede haber primavera más enjundiosa que la granadina y se está concentrando todo en las mismas fechas. Por ejemplo, la Media Maratón del próximo domingo. Aunque se eso, hablamos más despacio estos días.

Lo siento, pero no tiene sentido que Granada Paradiso y la Feria del Libro se pisen mutuamente. Porque el público objetivo al que van dirigidas ambas citas es el mismo. Al menos, el público granadino. Que si de lo que se trata es de mostrar al turismo cómo molamos, en plena temporada alta, hablamos de otra cosa.

 

Habrá que estar atentos al panorama literario y cinematográfico a partir de mayo. Que tenemos Cines del Sur, en junio, pero… ¿habrá algo más? Ojalá me equivoque y me tenga que comer esta columna, pero me veo añorando estos días en que, para ir a una actividad cultural, debo renunciar a muchas otras.

 

Jesús Lens

El segundo de los Encuentros Especiales de Granada Noir, con Enrique Bonet

Granada Noir ha iniciado una serie de Encuentros Especiales Noir, en colaboración con Cervezas Alhambra: entrevistas on line que permiten hablar, en profundidad, con autores de género negro

 

Tras la conversación con Alejandro Pedregosa, el invitado del segundo Encuentro Especial Noir es Enrique Bonet, cuya conversación podrá seguirse en directo, a través de Facebook Live, mañana martes, a las 19.30 horas, desde el restaurante San Cayetano de Churriana de la Vega

 

 

Granada Noir, con la colaboración de Cervezas Alhambra y la producción de Acento Comunicación, ha puesto en marcha una pionera iniciativa: los Encuentros Especiales Noir.

Estos Encuentros permiten realizar entrevistas en profundidad a autores adscritos al género negro, transmitidas en directo a través de Facebook Live y editadas posteriormente en YouTube, para que estén a disposición del público.

 

El primero de dichos encuentros, desarrollado en el granadino kiosco Las Titas, contó con la participación del escritor Alejandro Pedregosa, quien hizo un pormenorizado repaso a su actividad como autor de relatos, novelas y poesía. El vídeo con el primero de estos Encuentros Especiales Noir está tanto en la página de Facebook de Granada Noir como en su canal de YouTube: https://youtu.be/300qdan5Ko4

 

El segundo de estos Encuentros Especiales Noir tendrá lugar mañana martes 28 de marzo y se desarrollará en el restaurante San Cayetano de Churriana de la Vega, a las 19.30 horas, con la presencia de Enrique Bonet, guionista y dibujante de cómics, con quien Jesús Lens, director de Granada Noir, hablará sobre su obra y su trayectoria, con especial atención a “La araña del olvido”, sobre la investigación de Agustín Penón, publicada por Astiberri.

 

Se retransmitirá igualmente en Facebook Live, a través de la página de Granada Noir y, posteriormente, estará en YouTube.

Granada Noir, un festival que se extiende a lo largo de todo el año

 

Con iniciativas pioneras como la de los Encuentros Especiales Noir, Granada Noir y Cervezas Alhambra extienden la actividad del festival cultural a lo largo de todo el año, permitiendo que llegue a todos los públicos a través de las nuevas tecnologías de la comunicación.

 

Los Encuentros Especiales Noir se suman a otras iniciativas que dan continuidad y permanencia a Granada Noir, contribuyendo a crear un núcleo estable de difusión cultural con el género negro como eje central.

Así, Granada Noir está colaborando con CAJAGRANADA Fundación y la Alianza Francesa de Granada en su AulaCine, proyectando un ciclo de películas francesas en las que hay varios títulos esenciales del Noir europeo, tras el ciclo dedicado a los asesinos en serie más famosos de la historia del cine.

 

En el mismo sentido, en la próxima Feria del Libro, Jesús Lens tendrá un encuentro con lectores de Patricia Highsmith, para hablar sobre uno de sus libros míticos, “A pleno sol”, en el marco de la Feria del Libro. Además, en el Centro Lorca, se está preparando un encuentro con Clubes de Lectura para conversar sobre los orígenes del género negro.

 

Colaboración entre instituciones y citas culturales

 

Granada Noir está estableciendo un marco de colaboración permanente con instituciones, certámenes y citas culturales de Granada, para compartir contenidos y reforzar actuaciones atractivas a todos los públicos.

Así, además de estas primeras colaboraciones con la Feria del Libro y el Centro Lorca, Granada Noir está en conversaciones con el festival Cines del Sur, para incluir una retrospectiva de cine negro oriental en la edición de 2018 y con el certamen Cinema Paradiso, para organizar sesiones especiales de cine negro clásico, también en la edición de 2018.

 

Además, Granada Noir colabora con la asociación Ool Ya Koo en la producción de conciertos especiales basados en bandas sonoras de cine negro y con librerías y distintos clubes de lectura, para difundir el género policíaco.

 

El festival Granada Noir

 

Granada Noir es un festival multidisciplinar de carácter popular dedicado al género negro y policíaco, puesto en marcha en 2015 por Gustavo Gómez y Jesús Lens y que cuenta con el patrocinio de Cervezas Alhambra y la colaboración de Diputación de Granada, CAJAGRANADA Fundación, la Alianza Francesa de Granada, Consejería de Cultura, Turismo y Deportes de la Junta de Andalucía y Ayuntamiento de Granada, además de otras empresas, comercios y particulares.

GRN es un festival que promueve un variado maridaje de propuestas culturales de calidad contrastada; una cita de carácter abierto, creador, innovador, participativo y gratuito, que saca la cultura a la calle, a los barrios y a los pueblos y que, además, la lleva a bares, bibliotecas, clubes, cines y cafés.

 

Un festival cuyo programa está abierto a todas las artes y que permite maridar las disciplinas más diferentes, posibilitando el contacto y la relación directa entre autores, creadores, público y aficionados.