Desconfianza empresarial

No. No me refiero a los empresarios catalanes que están mudando el domicilio social fuera de su región autónoma. Aunque no se lo crean, hay parcelas de la actualidad que no tienen que ver con EL tema.

Por ejemplo, el suplemento Expectativas de este periódico, ayer domingo, traía una noticia que debería preocuparnos a todos: los empresarios granadinos, además de ser los menos optimistas de los empresarios andaluces, muestran menos confianza en el futuro que en los años 2013 o 2014, cuando estábamos en lo peor de la crisis.

 

¿Por qué será que, mientras Málaga es la provincia con mejor situación empresarial y más halagüeñas expectativas de Andalucía; Granada y Jaén son las dos únicas que señalan una tasa de variación negativa en el Índice de Confianza Empresarial correspondiente al cuarto trimestre del año, recientemente publicado por el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía?

 

Ahora que el PSOE provincial estrena secretaría general y nueva ejecutiva, debería echarle una pensada al tema de por qué los empresarios granadinos ven las cosas tan negras y muestran semejante falta de confianza y pobres expectativas de futuro.

El PSOE es el partido que nos gobierna en la comunidad, en la provincia y en la capital. Y no parece que, con sus políticas, esté precisamente encandilando a los empresarios. Esos empresarios que, al margen de esa inmensa maquinaria que es la administración, en su doble vertiente de oficial y paralela, son quienes generan riqueza y empleo. O, al menos, deberían hacerlo.

 

El análisis publicado en Expectativas señala que “los retrasos en las infraestructuras y proyectos de futuro” pueden ser una de las causas del pesimismo circundante, en palabras de Luis Aribayos, secretario general de la Confederación Granadina de Empresarios.

 

Lo de las infraestructuras tiene que influir, necesariamente. Pero… ¿proyectos de futuro? ¿De qué proyectos de futuro hablamos, aplicados a Granada? Porque yo me pongo a pensar y, excepción hecha del acelerador de partículas y de la Capitalidad Cultural del 2031 -¡cuán largo me lo fiáis!- no caigo en ninguno.

Pero también es verdad que es domingo y tengo las meninges aletargadas. ¿Serán las conducciones de la presa de Rules? ¿Será la ampliación de las líneas del Metro? ¿Serán los 8.000 millones del pacto para la Estrategia Industrial 2020 de Andalucía, firmado por Junta, CEA y sindicatos el pasado enero… y del que nunca más se supo?

 

Jesús Lens