Charlando en Ubú Libros

¡Gente! El martes 16, a las 18 horas, nos vamos a encontrar en la Librería Ubú, en el Realejo granadino, para hablar de películas y de libros. En concreto, de películas basadas en libros.

Y, como decía la antigua publicidad… y de lo que surja.

¿Conocéis Ubú Libros? Pues pinchad aquí, que os va a encantar.

 Ubú librería

Está en la Plaza de las Descalzas, 3 y es uno de eso espacios en los que, nada más entrar, notas electricidad en el ambiente. De hecho, esa electricidad se nota en cuanto te asomas a su escaparate. Un escaparate bien cuidado, con libros apasionantes que te invitan a traspasar las puertas y bichear.

Dentro, buena música, dos espacios, libros de los géneros más diversos y, sobre todo, libros diferentes a los que puedas encontrar en cualquier gran superficie. Además, detalles de esos que tanto nos gustan a los enamorados de los libros: cuadernos, marcapáginas, revistas, fotos, imágenes…

 Ubú libros

Y la presencia de una librera que es precisamente eso: librera. Una persona enamorada de su profesión y que ama y transmite su amor por los libros y la literatura.

Y un marco tan cálido y agradable vamos a charlar.

Tranquila y reposadamente. Pero con pasión. De libros, películas, música… de todo lo que se nos vaya ocurriendo.

Era otro libro, pero también habrá Alhambras fresquitas ;-)
Era otro libro, pero también habrá Alhambras fresquitas 😉

¿Te animas a pasarte por allí?

El martes 16. A las 6. De la tarde. Que por la mañana hace mucho frío.

¿Hace?

Jesús Lens

Firma Twitter

¡Sacabó!

Al menos, en un 99%. O en un 95%…

Ahora quedan los retoques, los pulimientos y demás. Y las conclusiones. Y las sorpresas, los añadidos, los engarces… Pero ese nuevo libro, mi nuevo libro; está básicamente terminado.

Fue un domingo cuando le puse el punto y final. Provisional. Además, era el último día de septiembre.

Habían llegado los primeros fríos, las primeras lluvias y el tiempo tormentoso.

Es como cuando estás en África y llegan las lluvias: ¡se acabó!

Se acabó el turismo, se acabaron las visitas y se acabó el moverse. Cuando llegan las lluvias, más te vale tener billete de vuelta… o una buena habitación de hotel desde donde ver llover.

Han sido meses intensos, viendo cine sobre África, leyendo, investigando… y escribiendo. Y las semanas del verano, frenéticas: horas y horas frente al ordenador, tardes, noches y fines de semana sin poner un pie en la calle.

Pero cuando se escribe con gusto y pasión, nada de eso importa y, muy al contrario, se saca tiempo hasta de debajo de las piedras, con tal de escribir. Semanas en que no he pisado una sala de cine, en las que apenas he leído algo más que material de trabajo para el libro y en las que ni siquiera he bajado a Carchuna, los fines de semana.

Ahí tengo pendientes de ver las nuevas temporadas de “Mad Men”, “Juego de Tronos” o “Tremé”. Los libros se acumulan en pilas y en precario equilibro y pocos discos he escuchado, fuera del “Graceland” de Paul Simon, del “The Roll Back Malaria Concert” y otros de músicos como Salif Keita, Cheik Lo, Fela Kuti o Rokia Traoré.

Porque África es su cine, África es su literatura y África es su música.

Una vez que hemos terminado lo más duro, llega lo no menos importante: la publicación y, en su caso, la portada, las imágenes, las fotografías, los textos, el prólogo, el prefacio…

¡Uf!

Pero todo eso vendrá después. Ahora toca parar y dejar descansar las 430 páginas que nos han salido. Que respiren. Que se asienten. Que cojan cochura, antes de volver sobre ellas. Además, ya sabéis que hemos creado un grupo de Facebook, Una Ventana Africana, para ir hablando de todos estos temas, poner música, fotos, vídeos, etc. ¡Dadle al Me Gusta, para estar on line!

Tiempo de regresar a las calles, a los libros, al cine, a los tebeos. Y a los bares. Tiempo de recuperar el pulso a esa normalidad que tanto nos gusta y que, bien lo sabemos, no tardará en verse afectada por otra idea, otro proyecto, otra locura.

Porque en nuestra vida hay una máxima, que aprendimos en Semana Negra y que nos aplicamos todos los días.

Una máxima que sirve para cerrar cada mail, cada correo, cada conversación…

¡Seguimos!

Jesús Lens

La presa desnuda

“Hace cien años, África era un vasto continente desconocido. Solo unos pocos exploradores y misioneros, los buscadores de marfil y los infames traficantes de esclavos arriesgaban la vida por unos caminos empapados de sangre. El premio era colmillos de elefante y esclavos lustrosos de sudor, vendidos por los jefes de tribu durante las incesantes guerras tribales o capturados por los negreros. El león y el leopardo cazaban sin piedad entre los rebaños de animales. Y los hombres, incapaces de comprender a los otros hombres…se volvían como las bestias. Y sus vidas eran como las de las bestias.”

Jesús apresado Lens

¿Y el 30 de septiembre de 2008, 2009, 2010 y 2011?