Pantallas apuntando al Sur

Ya ha comenzado Cines del Sur. Las primeras proyecciones arrancaron ayer y la inauguración se desarrolló en el Palacio de Carlos V con la película argentina “Traslasierra”, del cineasta Juan Pablo Saisaín. ¿Les suenan la película o el director? A mí tampoco. Y precisamente eso es lo mejor de este festival: te permite descubrir joyas que ni sabías que existían de cinematografías ignotas y sorprendentes.

Existen dos tipos de festivales: los que tienen presupuestos altísimos y se pueden permitir contar con luminarias del mundo del espectáculo que, por sí mismas, arrastran a las masas; y los más modestos, basados en el buen hacer de sus responsables y programadores, en cuyo criterio, trabajo y experiencia deben confiar los espectadores, sabiendo que no les defraudarán sus propuestas.

Tomemos como ejemplo el ciclo que presentamos esta tarde en el Teatro CajaGranada, a las 18 horas: “Lo mejor de África”. ¡Ahí es nada! Ocho películas que han pasado por el Festival de Cine Africano de Tarifa a lo largo de sus quince años de historia y sobre las que nos hablará Mane Cisneros, su directora. (AQUÍ, la programación)

Películas de países como Islas Mauricio, Etiopía, Chad, Senegal, Ruanda, Marruecos, o Túnez; algunos de los cuáles, difícilmente sabríamos situar en un mapa. Películas que, precisamente, nos van a servir para conocer un poco más y mejor la realidad social de su entorno, a través de las historias que nos cuentan sus directores y guionistas.

Ha comenzado una semana de proyecciones de cine diferente y poco habitual. Cine filmado, en muchas ocasiones, con precariedad de medios. Pero siempre con talento, ilusión, imaginación, coraje, valentía y compromiso. Y, lo más importante: buen cine. Porque Mane Cisneros es una autoridad en lo que al cine africano se trata y, para seleccionar las ocho perlas que, desde hoy, se proyectan en el Teatro CajaGranada, ha visto miles de películas a lo largo de su vida.

Confíen en la experiencia de Mane y del resto de programadores de Cines del Sur y déjense conducir por un viaje de descubrimiento y fascinación a otras filmografías. Abran sus mentes. No comparen de acuerdo a los estándares al uso y abandonen por unos días la trillada cotidianeidad de Netflix o la aparatosidad del cine industrial norteamericano: cuando pasen estos diez días y despertemos, esos colosos seguirán ahí, incólumes e impertérritos, mientras que nosotros habremos ampliado fronteras.

Jesús Lens

El sueño de Dalí

¿Y si su muerte marcó el kilómetro cero de su viaje iniciático? ¿Era necesario que muriera para alcanzar la inmortalidad que persiguió con tanto denuedo? ¿Y si, efectivamente, el final solo es otro principio? De hecho, es muy posible que nos siga mirando y se encuentre entre sorprendido y alucinado por el nivel de surrealismo que generamos a nuestro alrededor.

Me he quedado muy impresionado por el álbum que nuestro compañero Carlos Hernández le ha dedicado a Dalí, recién publicado por Norma Editorial. Impresionado y sorprendido. No por su calidad y talento, que el padre de Orcemán y Chucky los derrocha a raudales; sino por el original planteamiento y el osado desarrollo que sigue en la composición de un cómic que exige varias, detalladas, atentas y sucesivas relecturas.

El próximo jueves, a las siete de la tarde y en el Centro Lorca, tendré ocasión de interrogar a Carlos Hernández sobre el porqué del punto de vista elegido para este retrato de Dalí. Sobre el proceso de documentación seguido para conocer aspectos tan sorprendentes de su vida y su pensamiento. Sobre la particular selección de los momentos estelares de su biografía. Sobre la elección de los cuadros en los que pone el foco.

Y créanme que estoy ansioso porque llegue el momento de profundizar en las entrañas de la creación de este álbum. Como les decía, “El sueño de Dalí” me parece una joya y, además de hacerme disfrutar como se disfruta del primer trago de cerveza en una tarde de verano, me ha despertado una enorme curiosidad por ampliar conocimientos sobre el Dalí que hay más allá del histriónico sujeto que no dejaba de representar el papel de enfant terrible allá por donde iba.

Su pasión por la ciencia y los últimos avances científicos, por ejemplo. En concreto, la relación entre la mecánica cuántica y la inmortalidad del alma y las teorías de los múltiples universos. Porque todo ello está en su pintura.

Háganse con “El sueño de Dalí” y embárquense en un viaje en el tiempo que conecta lo terrenal, lo material y lo mundano con lo espiritual, lo místico y lo llamado a trascender. Un cómic extraordinario que, al estilo de los icebergs, por cada plano que muestra a la vista, sugiere ocho más al lector que tenga curiosidad por desvelar a un genio de la pintura universal.

Jesús Lens

Presidente on the road

Fue a finales de octubre de 2016. El día 2 de ese mismo mes había sido defenestrado como secretario general del PSOE por el núcleo duro de su partido. O lo que parecía ser el núcleo duro.

Un mes tardó en digerir Pedro Sánchez su batacazo. Un mes que le sirvió para recomponerse y lanzar una campaña a través de su web que buscaba “recuperar y reconstruir” el PSOE. Acababa de renunciar a su escaño en el Congreso de los Diputados y anunciaba que cogía su coche para echarse a la carretera y reunirse con los militantes socialistas, hablar con ellos y, sobre todo, escucharles.

“Yo no fallaré a la cita y sé que tú tampoco. ¿Me acompañas?” Ese fue el mensaje que el vilipendiado Sánchez envió a la militancia. Parecía un mensaje a la desesperada, el mensaje en una botella que un náufrago lanzaría a la inmensidad del océano.

Menos de dos años después, ese náufrago es el Presidente del Gobierno de España, a pesar de todos los pesares, tras soportar presiones casi insoportables y esquivar torpedos lanzados desde todos los frentes. Me resultó sorprendente leer a “analistas” que, tras el veredicto del PNV, seguían insistiendo en que Pedro Sánchez debía convocar elecciones, dejar al PP a los mandos de la transición y tratar de ganar en las urnas. ¡Qué chungo, confundir los deseos -y los intereses partidistas y económicos- con la realidad!

Cuando leí lo de Sánchez on the road, les confieso que pensé que ya le valía su empecinamiento, que hay que saber perder y retirarse a tiempo. Y ahí lo tienen, desalojando a Rajoy de la Moncloa.

El 18 de marzo de 2017, Pedro Sánchez llegaba a Granada en su On the road particular. Intervino en un acto con militantes en que participaron José Antonio Rodríguez, alcalde de Jun, y Belén Navarro. “La plataforma por Pedro Sánchez en la provincia de Granada ya aglutina a alrededor de 14 alcaldes, secretarios generales de agrupaciones locales, secretarios de organización y militantes de base que están participando en este movimiento de apoyo al candidato”, informa IDEAL.

A comienzos de enero de este año, Pedro Sánchez volvía a Granada, ya como Secretario General del PSOE, para presentar su propuesta para el sistema público de pensiones. ¡Cuánto camino recorrido y en qué poco tiempo! Magistral lección de resistencia y de resiliencia.

Jesús Lens

E-moción de Corpus

No puedo esperar a saber si el PNV va a rematar a Rajoy o terminará por indultarle. Tengo la necesidad compulsiva de escribir, antes de comer, porque la mañana ha sido tan pródiga en emociones que el resultado final de la contienda no importa tanto como la concatenación de impactos. (Al final, fue descabello).

Mientras la procesión del Corpus Christi gozaba del fervor popular bajo un límpido cielo azul, los titulares informativos se acumulaban y tropezaban en torno a un mismo concepto: salida.

Pedro Sánchez martilleaba a Rajoy, exigiendo la suya. A la vez, Rosalía Iglesias, la mujer de Bárcenas, conseguía la orden de salida de prisión gracias a una fianza de 200.000 euros reunida en un tiempo récord. Y, por si faltaba poco, Zidane anunciaba su sorpresiva y traumática salida del Real Madrid.

Hubo un momento de completo delirio en que se me llegó a plantear la posibilidad de que Zizou fuera el candidato de consenso exigido por el PNV para apoyar la moción de censura y que Rajoy acabara en el banquillo blanco, entrenando por Europa y sentado a la derecha del padre Florentino.

Ya saben ustedes que yo creo en los símbolos y en su causalidad. Por tanto, cuando comprobé que Zidane se iba -por la puerta grande- y vi a Willy Bárcenas llegar a la prisión de Soto del Real con la fianza que abrirá la puerta de cárcel a su madre; tuve claro que Rajoy había llegado a la casilla de salida del tablero de juego. Solo que, en su caso, la casilla de salida marca el final de la partida, no el principio.

Mientras Granada celebra su semana grande entre Tarascas, dragones y casetas, bien regada con cerveza y palitos de ron; la gente baila sevillanas y vibra en las atracciones mecánicas con un ojo puesto en el Ferial y otro en la Carrera de San Jerónimo.

Durante otro Corpus igualmente emocionante, hace ahora 6 años, España fue intervenida por la Unión Europea. Rajoy era presidente y Luis de Guindos, ministro de economía. Hoy, Guindos es vicepresidente del BCE… ¿y Rajoy?

Jesús Lens

Alcadima: tradición andalusí en la puerta de la Alpujarra

Cuando franqueas la entrada del Hotel Alcadima de Lanjarón tienes la sensación de entrar a un pequeño pueblo en sí mismo, perfecta condensación de La Alpujarra, concentrada en torno a una enorme piscina y la coqueta terraza de su acogedor restaurante, referencia culinaria de una de las comarcas más especiales de nuestra tierra.

No hay ningún detalle dejado al azar en Alcadima, un espacio construido en torno al agua que fluye a través de diversas fuentes repartidas por las amplias y generosas zonas comunes de un hotel familiar, cálido y encantador.

Mientras disfrutamos de un espectacular paté de perdiz casero -prácticamente todo es casero, en Alcadima- con pan horneado en el propio restaurante, Amanda nos cuenta la evolución de un lugar que nació en 1951, como la primera piscina pública mixta de Andalucía Oriental, puesta en marcha por su abuelo, José Morillas Mingorance.

La segunda generación de la familia se hizo cargo de Alcadima en 1984, construyendo las distintas fases del hotel y el restaurante para convertirlos, poco a poco, en el auténtico remanso de paz y tranquilidad que conforman hoy en día.

Al frente del restaurante se encuentra Gonzalo Rodríguez Alonso, yerno de José Morillas y padre de Amanda, hombre de letras y gran aficionado a la historia que un buen día descubrió el placer de la cocina y, desde entonces, no ha parado de inventar e innovar, de mezclar, combinar y… redescubrir.

Por ejemplo, y aprovechando que ahora mismo hay un cocinero hindú en Alcadima, la carta del restaurante ofrece un suculento secreto ibérico con salsa al estilo garam massala, siempre en cuenco aparte, para que el comensal la sirva al gusto.

Dado que Lanjarón está a 30 kilómetros de la Costa Tropical en línea recta, en sus jardines y huertas se cultivan mangos, aguacates y chirimoyos que, después, se combinarán en diversos platos de la carta, como el extraordinario y refrescante Carpaccio de mango con tartar de salmón y aguacate o la lujuriosa Ensalada de queso de cabra caramelizado y mango con mermelada de orejones.

Para amantes del pescado, Rape en salsa de azafrán con pimientos y orejones, Tataki de atún o Aguja con salsa de ajoblanco son algunas de las opciones. Y, volviendo a las ensaladas, muy destacable resulta la ensalada templada de bacalao, naranja y patata con vinagreta de verduras y garbanzos.

Si por algo de caracteriza Alcadima es por trabajar con productos locales y de temporada y, sobre todo, con la mejor verdura y fruta frescas, hasta el punto de haber sido elegido en Trivago como uno de los cinco mejores hoteles para vegetarianos de España.

Y otro detalle que refleja la personalidad de las tres generaciones que han ido dejando su impronta en el lugar: el redescubrimiento y actualización del recetario tradicional alpujarreño, que va mucho más allá del famoso plato con huevos, patatas, chorizo y morcilla que todos conocemos; desde las migas del pastor con pimentón a la tortilla con miga, hecha con pan, leche, ajo y perejil. Potajes de castañas y el conejo como piedra angular de unos platos de carne en los que el cordero o la ternera se reservaban únicamente para ocasiones muy especiales.

Mención aparte merece el llamado Choto de Pago, equivalente a los gastos del notario cuando se cerraba un trato en la Alpujarra y se celebraba con la ingesta compartida de un cabritillo al colorín, por ejemplo.

Resulta y placer y un privilegio escuchar a Gonzalo hablar sobre otra de sus pasiones histórico-gastronómicas: la recuperación de platos andalusíes, un empeño en el que le acompaña su hija Amanda. Ahí, la berenjena es la reina y la suculenta Pierna de cordero con miel, cítricos y romero de la carta de Alcadima es su mejor embajadora.

Terminar la comida con la soberbia Crema de almendras o el Biscuit de higos hace que el paso por el primer pueblo de la Alpujarra se deje un inmejorable sabor de boca.

Jesús Lens