El sesabidismo

No me gusta. De hecho, lo odio. El sesabidismo. Lo de esta semana, por ejemplo, tras la detención de Quique Pina, el antiguo presidente del Granada C.F.: en cuanto se convirtió en tendencia, las redes sociales se llenaron de comentarios sesabidistas. El famoso y manido se-sabía, todo-el-mundo-sabía-que… o el egocéntrico yo-ya-lo-dije.

El sesabidismo tuvo su máxima expresión con la Crisis, cientos del profetas del pasado que no solo la habían visto venir, sino que habían alertado contra ella. Resulta una incógnita, con tanto visionario, cómo nos pudo sorprender al común de los mortales. Será que profetizar el pasado, a posteriori y mirando por el retrovisor, no sirve de mucho.

Ahora resulta que todo el mundo sabía que Quique Pina era un… (que cada lector coloque ahí el término que considere más oportuno). Lo que es grave. Muy grave. Porque si una inmensa mayoría de ciudadanos de a pie lo sabía, más enterados aún deberían estar los políticos, empresarios y representantes de las instituciones que iban domingo sí y domingo también al palco de Los Cármenes… a disfrutar del fútbol, debemos suponer.

¿Y los patrocinadores del club, en los años de la presidencia pinar? ¿También lo sabían? Porque, en ese caso, se les podría culpar de cosas. O quizá solo lo sospechaban y prefirieron aplicar la presunción de inocencia para sumarse a la fiesta.

Créanme que, como aficionado al género negro, no me las voy a dar de ingenuo. Que además de ver las películas de Coppola, también he leído “El Padrino”, novela de Mario Puzo que comienza con una cita de Balzac: “Detrás toda gran fortuna, siempre hay un crimen”.

La pregunta es: si se sabía, ¿por qué duró tanto la fiesta, alentada y alimentada por tanta gente que ahora se rasga las vestiduras? ¡Ay, qué complacientes somos con la corrupción cuando nos depara bienestar, en forma de balón o de burbuja inmobiliaria, y qué dados somos a exigir pureza de sangre y que rueden cabezas, una vez pinchado el invento!

A este ritmo, a los agentes de la UDEF habrá que darles la tarjeta Granada Card y el pase pernocta a la Alhambra, dada la cantidad de tiempo que están pasando en Granada, entre la operación Nazarí y la Líbero. Verás tú, el día que se descubra lo de la marihuana…

Jesús Lens